La Dirección de Fauna y Flora Silvestre, dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Bosques y Pesca, junto al Club de Observadores de Aves del Valle Inferior del Río Chubut (COA VIRCh) brindó una charla abierta en conmemoración de los 30 años de trabajo en Punta Tombo, donde se aplica el Proyecto de Investigación Pingüino de Magallanes desde principios de la década de 1980, y único en duración en Latinoamérica para el estudio de la especie magallánica.
El encuentro se realizó el miércoles último en instalaciones de la Secretaría de Cultura en Rawson. La apertura estuvo a cargo de la directora de Fauna y Flora Silvestre, Silvana Montanelli, y las charlas fueron encabezadas por la directora del proyecto, la doctora Dee Boersma, quien además es profesora de Biología en Seattle, Estado de Washington, y desde hace 30 años desarrolla investigaciones sobre la colonia de pingüinos de Punta Tombo, la reserva más grande de la especie magallánica.
Además participó el investigador reconocido internacionalmente Pablo García Borboroglu, quien estudia la demografía y dinámica de poblaciones de aves marinas en la Patagonia.
Al respecto, la encargada del proyecto dijo: “Punta Tombo es un lugar único en el mundo, que cuenta con características como la fácil accesibilidad. A partir de los trabajos de campo que efectuamos vamos recabando información nido por nido, contando la cantidad de ejemplares y todos esos datos son enviados para publicaciones científicas. Además, actualmente estamos trabajando en la producción de un libro”.
En cuanto al plan de trabajo, la doctora destacó: “Recibimos aportes de la Universidad de Washington y también del ámbito privado, contando con colaboraciones de asociaciones y empresas multinacionales como ‘The Walt Disney Company’”.

Las reservas

En el mundo se registran unas 138 colonias de la especie. En particular, en Argentina hay aproximadamente 56 y en Chubut se inscriben tres colonias como aptas para las tareas de conservación y apertura al público. Las mismas están situadas en Cabo Dos Bahias, San Lorenzo y Punta Tombo.

El Club de Observadores de Aves

El COA VIRCh forma parte de la Red Nacional de Clubes de Observadores de Aves, que es coordinada por Aves Argentinas. Entre otras actividades, el club regional desarrolla tareas de educación ambiental, gestión conservacionista y promoción de la observación.
Los Clubes de Observadores de Aves son grupos independientes, voluntarios, organizados bajo normas propias, sin fines de lucro, con espíritu democrático y participativo, integrados por movilizadores de la temática ambiental en la localidad donde habitan. Realizan actividades para promover una agenda ambiental en sus localidades, y están coordinados a nivel nacional a través de Aves Argentinas.
Aves Argentinas es una entidad participativa, informada, democrática y con base científica. Desde su creación, conservacionistas importantes y científicos renombrados dieron forma a una institución que ya lleva casi un siglo trabajando por el patrimonio natural de los argentinos.