Se trata de Alejandro Darío Lavín, quien fue apresado junto a Jorge Marcelo Lepe, Gustavo Daniel “el Huevo” Silva y Rubén Darío Crespo en Alsina y Rawson a bordo de dos vehículos secuestrándoles dos revólveres calibre 22 y 32, además de una pistola calibre 40 y municiones para cada una de esas armas. Fue acusado de portación de arma. De esta forma, de quince detenidos sólo uno quedó en prisión preventiva.
En una extensa jornada donde se tuvieron que tomar recaudos preventivos ante la posibilidad de un nuevo cruce, se llevó a cabo la audiencia de control de detención de los 15 detenidos por el enfrentamiento que protagonizaron el viernes dos facciones de la Unión Obrera de la Construcción de la Republica Argentina.
Sólo quedó detenido uno de los imputados, Alejandro Darío Lavín (26), quien deberá permanecer un mes en prisión preventiva por portación de arma, tras haber sido arrestado en Alsina y Rawson, donde se interceptó una Toyota Hilux (dominio GTF 650) y un Rover (dominio BST 470) en los cuales circulaban también Jorge Marcelo Lepe (35), Gustavo Daniel “el Huevo” Silva (31) y Rubén Darío Crespo (30), secuestrándoles dos revólveres calibre 22 y 32, además de una pistola calibre 40 y municiones para cada una de esas armas.
Alrededor de las 9:30 se inició la audiencia presidida por el juez José Rago, con la presencia del fiscal general, Marcelo Crettón, y la funcionaria Lorena Garata. Allí se dieron a conocer los hechos del viernes, donde el grupo se habría enfrentado a quienes ocuparon la sede, huyendo luego del lugar. Finalmente, se formalizó la apertura de la investigación para Silva, Crespo y Lepe y se dictó la prisión preventiva para Lavín.
Por la tarde, la segunda audiencia vinculada a este hecho se desarrolló desde las 16:10. Julio Romero, Luis Nazer, Andrés Carrizo, Brian Vargas, Flavio Carimoney, Carlos Altuna, Pablo Díaz, Luciano Torres, José Vidal, José Arce y Miguel Angel Vázquez, comparecieron ante el juez.
Allí también se detallaron los hechos ocurridos el viernes, acusándolos de ingresar por la fuerza al gremio ubicado en Rawson al 1.400, bloqueando la puerta y manteniendo al sereno en el lugar en contra de su voluntad y golpeándolo.
También se los sindicó de efectuar disparos contra los disidentes que se encontraban fuera del edificio, sin herir a ninguno, pero provocando daños en una vivienda cercana. Además, de haber sustraído efectos personales del sereno.
El hecho fue calificando provisoriamente como “usurpación en concurso real con privación ilegítima de la libertad agravada por ser cometida con violencia, en concurso ideal con lesiones graves y robo”, en calidad de coautores.
En este marco, la Fiscalía pidió la prisión preventiva para todos los imputados; sin embargo, el abogado Guillermo Iglesias, defensor de los once detenidos, se opuso a ello argumentando que no se registró violencia en la puerta de ingreso, y que el sereno no se pudo ir del lugar por la balacera que se produjo con el grupo antagónico. Además, sostuvo que sus defendidos no ingresaron con armas de fuego ya que al entregarse fueron palpados por la policía y ninguno llevaba armas.
De esta forma, el juez penal resolvió la libertad de los mismos por entender que no había elementos suficientes para considerarlos coautores del hecho. Ordenó medidas sustitutivas de prohibición de acercamiento al sereno del lugar y a los otros cuatro imputados.