MALDITA TECNOLOGÍA

Las otras 10 cosas que verán nuestros nietos

La semana pasada reseñamos la lista de los 10 posibles acontecimientos notables para los siguientes 100 años que había compilado la cadena británica BBC y traducido el sitio Pijama Surf. Nos habían quedado 10 pendientes, acá las otras diez cosas que nosotros nunca disfrutaremos, pero en el mejor de los casos nuestros nietos sí.
Alejado de los hechos tecnológicos, los editores de la BBC creen que por lo menos el 80% del mundo aceptará el matrimonio gay. Esto parece contundente en Occidente y probablemente signifique toda una paleta de diversos matrimonios disponibles. En otras regiones donde la religión tiene mayor influencia opondrán mayor resistencia a esta tendencia que de todas maneras parece expandirse.
O que el matrimonio será reemplazado por contratos anuales. Mientras crece la aceptación del matrimonio gay, la institución del matrimonio tradicional declina. Esto se acentúa entre más tiempo vivimos. Si en un futuro podremos vivir más de cien y quizás cientos de años, la perspectiva de pasar toda la vida con una sola persona se altera. “Las personas querrán matrimonios que no duren para siempre y que no los dejen en la bancarrota cuando acaben”.
California liderará la ruptura de Estados Unidos. Ya existen ciertos indicios de que California quiere dividirse y esto podría intensificarse. La enorme diferencia entre la capacidad de generación de riqueza en un país tan grande puede ser una bomba tiempo; también la diferencia ideológica que se genera en un estado próspero en el que concurren diversas etnias y formas de concebir la existencia podría influir.
Y más al este, Gran Bretaña vivirá una revolución. Hecho, que estudiando la historia de este país, no parece tan tirado de los pelos.
Otro hecho que podría revolucionar nuestras vidas, al menos la de nuestros nietos, es que los elevadores espaciales harán accesibles los viajes siderales. Aparentemente estos constituyen un paso lógico en el desarrollo del turismo espacial y al multiplicarse harán menos costoso el transporte al espacio, que, digamos, el vuelo en aeronaves como las de Virgin Galactic. Por otro lado el desarrollo masivo de esta tecnología supone cierta prosperidad mundial, algo que no puede garantizarse.
Otro dato sociológico que auguran es que las mujeres lo mismo se embarazarán por inseminación artificial que por un hombre. Algo que por el momento sólo es excepcional, pero si se toma en cuenta que el diagnóstico de implantación pre-genética permite que un embrión sea seleccionado por sus características más favorables es cada vez más popular y que es posible ya descartar embriones que tengan enfermedades congénitas, en un futuro la inseminación artificial podrá asemejarse al diseño genético, donde se captarán solamente los caracteres deseados.
Un augurio un tanto apocalíptico es que existirán museos para casi cualquier aspecto de la naturaleza, ya que la mayoría de los habitats naturales estarán destruidos. Esta fatídica predicción tiene el riesgo de convertirse en realidad si el ritmo de extinción de especies y de consumo de recursos sigue creciendo. Es posible que arribemos a un punto de inmortalidad tecnológica, pero en la que solamente podremos participar en la naturaleza a través de ambientes simulados o pregrabados. El mundo entero sería un museo cuya vitalidad sería preservada sola-mente como estímulos eléctricos programados en nuestro cerebro.
Una posible consecuencia del cambio climático es que los desiertos se convertirán en bosques tropicales.
En cuanto a la organización mundial, hay quienes aseguran que las naciones soberanas dejarán de existir y se establecerá un gobierno global, pero intelectuales como Ian Pearson afirman todo lo contrario, la formación de pequeños países, algunos incluso formados por corporaciones. La punta de lanza serán los multimillonarios en control de nuevas tecnologías que buscarán crear estados soberanos -pequeñas utopías- en aguas internacionales. O la versión new age optimista de que todas las naciones se unirán bajo principios elevados de libertad y compasión. Claro que para esto sería necesario un acontecimiento transformador (o cataclísmico) que altere radicalmente nuestra forma de vida (y nuestra conciencia).
Por último, los editores de la BBC aseguran que la Guerra en el Oeste, la tan temida tercera guerra mundial, será llevada a cabo meramente por control remoto. Una tendencia relativamente fuerte con el desarrollo de los drones (aviones no tripulados).

ÚLTIMAS NOTICIAS