Fue notable la escasísima información oficial y el interés expuesto por las autoridades ante el brutal crimen que terminó este lunes con la vida de uno de los imputados en el “histórico” operativo antidrogas denominado “Arenas Blancas”. La historia dice que Jorge Dario Huenchueque (34) había estado detenido y quedó procesado por la cinematográfica causa por narcotráfico, que comenzó con 67 pedidos de detención, siguió con 54 procesados, pero a la fecha mantiene sólo 11 presos. Según versiones, había sido excarcelado hace dos semanas, y estaba dedicado a la urgente venta de su vehículo para intentar salir de la ciudad rumbo a la cordillera, pero cinco balazos le cortaron el viaje.
Ahora la policía busca un auto gris que algunos testigos habrían logrado identificar con cierta precisión al ser visto cuando iniciaba su huida del domicilio del barrio Pujol 2 en Madryn.
La definición de “hipótesis” sobre un presunto crimen por encargo, fue una tibia forma de atemperar un hecho que marca otro eslabón más de los nuevos modelos de delitos que se van imponiendo en la ciudad. Hasta hubo medios que obviaron y hasta omitieron el dato que el muerto era uno de los imputados y procesados en el más grande operativo de drogas que se produjo en Chubut en los últimos 20 años. ¿Falta de información del medio o cumplida tarea como vocero oficial de bajarle el tono al hecho? Vaya uno a saber. Lo cierto es que no resulta para nada natural que anden `ajustando cuentas´ con gente acusada de vender droga. Porque como dicen los especialistas en narco operaciones, es la punta de un iceberg difícil de dimensionar. “Si hay cobradores, hay deudores. Y si hay deudores, hay sicarios”

Desde que el 13 de junio de 2013 se hallaron 110 kilos de cocaína de máxima pureza en las cámaras de la pesquera Poseidón lista para exportación entre langostinos congelados, un despliegue de eventos no pararon de darse en una ciudad que no sale del asombro, y si sale, la vuelven a entrar con el grado de impunidad que se mantiene sobre hechos de tal envergadura.
Además de “Langostinos Santo”, se vivió la sorpresa del hallazgo de cocaína en exportación de pórfido en el operativo “Yeso Blanco”, y luego los originales enterratorios en el “Arenas blancas”, que terminó de opacar al resto, por la cantidad de involucrados conocidos en la presunta red descubierta por los Federales, que estaría operando hace años en Madryn.

¿Testigo en peligro?
A esta red pertenecía aparentemente Jorge Huenchueque. ¿Que debía o que sabía y se evitó que salga a la luz ahora con su asesinato?, vaya uno a saber. Dicen en el hampa que a los deudores chicos en general se los hiere pero no se los mata, como para terminar de cobrarles pero escarmentando a los demás. Con Huenchueque se aseguraron su muerte con cinco disparos certeros.
El hombre ya tenía antecedentes de presunto testigo.
Se empezó a hacer conocer por haber declarado en la causa por la muerte del empresario pesquero Raúl “Cacho” Espinosa, asesinado también de un balazo en la puerta de su casa el 30 de enero de 2003. En el fallo de agosto de 2011 que liberó a todos los imputados, en aquel momento, Huenchueque figura como uno de los que “salvó” adivinen a quien? A “Mingo” Segundo, el acusado de haber disparado contra Espinosa (también como Huenchueque, vecino del barrio Pujol 2). Según el ´testigo´ ahora fallecido, Segundo habría estado en «otro» lugar que no habría sido la escena del crimen.
A propósito, los memoriosos vinculan que quien fue señalado como el que le habría vendido el arma a “Mingo” Segundo (al que defendió Huenchueque), era precisamente “Miyi” Bustos, un compañero de red en “Arenas Blancas” del propio Huenchueque once años después.
Una coincidencia ahora razonada en base a los datos aportados por el minucioso detalle que ofreció el juez federal, Hugo Sastre con gigantogrfía incluída. Y como para completar el álbum de recuerdos, saben quién es “Miyi” Bustos? Alguien recordado cada 22 de diciembre, cuando se conmemora el crimen de Vanesa Retamal, una chica de 17 años introducida en un red de prostitución y menudeo de droga, asesinada y quemada en Cerro Avanzado en 1998, “que frecuentaba la casa de Miyi”, según testigos hace dieciséis años.
En fin, escarbando, escarbando, exprimiendo el sentido común y la memoria colectiva, los vecinos han ido aportando todos estos datos más certeros e hilvanados que muchas investigaciones oficiales.
¿Hace falta mencionar que las constantes de estos grupos delictivos son la droga, las armas y los asesinatos como para dudar tanto del carácter “vinculante” de los muertos violentos que se van sumando en Madryn? Parecería que no…

No hay peor ciego…

Restarle importancia a los eventos que rodean el narcotráfico arrastró a México por ejemplo a convertirse en un infierno de pérdidas humanas. No hace falta ir tan lejos. En la ciudad de Rosario, desde 2004 las muertes violentas vinculadas con el narcotráfico suman poco más de 1.000 reporta un estudio titulado «Calles perdidas» realizado por la Universidad Nacional (UNR) de aquella ciudad.
Además estiman ya en unos 2.000 millones de pesos (US$371,7 millones) anuales el volumen de los negocios ilegales que genera la droga en la tercera ciudad argentina como consecuencia de las operaciones que desarrollan las bandas.
«Economías ilegales, carencia de políticas públicas acertadas para combatir esta problemática (el narcotráfico), complicidad policial y uso de jóvenes en situación de vulnerabilidad social es el contexto en el que se mueven los narcos», define certeramente el informe universitario.
El reporte, en el capítulo en el que analiza los «homicidios vinculados con las drogas» detalla que hasta 2004, ese tipo de crímenes no superaban en aquella ciudad los 70 casos anuales, pero en pocos años superaron los 160 hechos.
El narcotráfico suele montarse sobre redes preexistentes. Pueden ser familiares, o bandas que se dedicaban a otro tipo de delitos y que tomaron la decisión de entrar al mercado de las drogas.
En cualquier caso, el común denominador es que cierta parte de la elite política y de las fuerzas policiales termina participando del negocio.
Distintos grupos se asocian y se distribuyen las tareas. Algunos tienen presencia directa en el territorio y se ocupan de la venta al menudeo, otros se encargan del transporte del producto, y una superior se encarga de establecer vínculos con las instituciones políticas y económicas”, explicaba no hace mucho el politólogo colombiano Juan Carlos Garzón Vergara, especialista en narcotráfico y crimen organizado del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y del Centro Woodrow Wilson.
El especialista también precisaba que “si hay deudores, hay cobradores y sicarios. Los cobradores suelen hacer su trabajo a cambio del 30 o 40 por ciento de la deuda”.

La rueda

El crimen de Huenchueque de cinco balazos por un presunto comprador de camioneta no fue el único hecho sangriento con droga enredada. En marzo de 2014, bajaron de tres balazos a un hombre que circulaba por el barrio Roca en una moto. Por el hecho fueron presuntamente detenidas cuatro personas. Circulaba en un Fiat Siena también color gris, y en el auto encontraron una pistola 9 milímetros. El hecho también fue considerado “ajuste de cuentas” y vinculado a venta de drogas, en lo que se supuso como un “marcado de territorio” que la víctima habría violado.
Los casos pueden ser por ahora “anecdóticos”, “presuntos”, “hipóteticos”, etc etc..lo cierto es que se van incrementando año a año y alertan concretamente sobre una avanzada de estos delitos que -por ahora- se siguen barriendo bajo la alfombra. Habrá que esperar que no nos tape la puerta…
En fin el círculo que se visualiza es cada vez más grande: venta de droga al menudeo; narcotráfico con exportaciones o intentos de piedra, pórfido, ripio, lana; escáner móvil, puertos semi liberados, Arroyo Verde semi distraído o superado, perros alzados, venta ilegal de armas, caza furtiva, sicarios baratos, mesas de dinero, vínculos políticos, asesores contables, estdo “bobi”, abogados hábiles, jueces amigos, muertos resonantes…más menos.

*Soy Juana de Arco, amiga de Juan de la Sota, fiel del Furia, seguidora de la Sombraonline y ceniza de tantos