Todos los meses entre los días 1 al 4 aproximadamente un hombre maduro de tez trigueña vestido informal y a la moda, hace cola en las cajas de uno de los bancos públicos con una mochila y hasta un bolso en mano. A veces concurre acompañado de algún amigo o empleado, la mayoría de ellas, se lo ha visto solo. Una mañana de este año, el hombre que llevaba más de dos horas de cola, comenzó a responder mensajes por su celular y a enviar también. Una señora que estaba detrás suyo le llamó efusivamente la atención: “Señor, ¿no sabe que no se puede usar celulares en el Banco?”, le dijo la vecina mientras le señalaba varios carteles que advertía sobre la prohibición; a lo que el hombre haciéndose literalmente el distraído pero muy educadamente le respondió: “Disculpe, la verdad es que no sabía”.
Tamaña sorpresa fue la de la mujer cuando alguien le trasmitió después que ha quien había marcado `en falta´ era nada menos que Omar “Cura” Segundo, el hombre que no solo usaba el celular en lugar prohibido, sino el mismo al que se le descubrió un almacenamiento de 110 kilos de cocaína (declarados) y sigue campante y sueltito por la vida.
Más fue la sorpresa de la mujer cuando vio con sus propios ojos como Segundo embolsaba millones de pesos retirados por caja y sin mayores inconvenientes que su sola firma, se llevaba en mano más del dinero que ella había visto junto en toda su vida.
Un rito que se repite cada treinta días y que pocos entendían hasta que trascendió los inconvenientes para operar cuentas sueldos y pagos de servicios por banco que posee la empresa que Segundo administra, todo por embargos potenciales y en puerta.
Tampoco nadie se explicaba hasta ahora como podía ser que con todos los señalamientos que enfrenta, la firma que logró alzarse con el trabajo que antes realizaba Meibar, seguía sosteniendo servicios para la firma más exigente con sus propios proveedores: Aluar, y para una terminal publica mucho más exigente para con sus operadores en términos de legalidad y transparencia, como es el mayor puerto exportador de la Patagonia: el Storni.
Es que para Aluar, desandar servicios con Socia, no será seguramente gratis, aunque se desconoce los términos contractuales que existen. Sin embargo se supone que todos ellos estarán supeditados a las exigencias de calidad y excelencia que mantiene y defiende a rajatabla la exportadora.
Mientras que el Puerto ahora intervenido, está haciendo cumplir los plazos a sus proveedores para hacer las tareas del hogar y dar pruebas de transparencia y voluntad de legalizar.
Todo quedó develado cuando faltando cuatro días para que venza la intimación portuaria, el Gobernador anunció a viva voz este fin de semana que se estaría achicando el margen de maniobra del narcotráfico, y en ese marco precisó que la empresa Socia de Omar “Cura” Segundo perdería su último bastión que es la prestación de servicio de estiba a la empresa Aluar, una `changuita´ que le permitiría manejar unos diez millones de pesos mensuales al “Cura”.
Como Al Capone, no es que la causa que lo involucra en el presunto almacenamiento de la tonelada imaginaria esté avanzando, (pese a que el fiscal federal era optimista a principio de año para que no pasara de abril la elevación a juicio); sino que al igual que uno de los malvivientes más famosos de la historia, Segundo terminaría su tiempo de prosperidad circunstancial debido a un problemita de `irregularidades´ impositivas, deudas que la firma de estibaje afronta y le condiciona su operatoria portuaria.
Sin embargo, hay que decirlo, la expectativa social no está ya centrada en el “Cura”. Quienes manejan información fina saben que Segundo no fue ni el ideólogo de la penetración a Aluar, ni el dueño real de todas las empresas que el `capanga´ portuario representó y en las que figuró siempre con el aval de Carlos Eliceche.

Que pase el que sigue…

El gran tema en juego es saber quien reemplazará a “El Cura” o a Socia. Si se sigue el `modus operandi´ que ha venido rodeando los negocios de esto que parece ser todo un grupo, para cada una de las empresas hubo una `salida´ acordada y donde el hombre, hay que decirlo, no sufrió ningun tipo de inconvenientes con empleados, deudas, embargos, compradores truchos, etc, para salirse del manejo de cada firma, merced al siempre excelente asesoramiento recibido.
Todo indicaría que esta no será una excepción, y que si bien Socia dejaría de prestar servicios para Aluar, otros del grupo de amigos cercanos pasarían a hacerlo por él.
Este es tal vez el punto clave para conocer, porque dará la verdadera dimensión si es que se trata de una “limpieza” en serio, o si es solo parte de una instancia intermedia o disimuladora de continuidad. Por ahora y pese a la contundencia de los anuncios del Gobierno, Aluar no anunció todavía formalmente el cambio de proveedor y probablemente no lo haga, tratándose de una operatoria entre privados. Extraoficialmente se sabría que todavía no habría una definición tajante de una empresa que pueda realizar este tipo de tareas a nivel regional, pero se barajan algunos candidatos.
Como primer postulado o hipótesis surgiría la posibilidad que la empresa que reemplace a Socia sea Patagonia Estibaje S.A., cuyo apoderado es el reconocido empresario Franco Finiguerra, pero cuya logística y gerenciamiento está a cargo de Raúl “Rabanito” Pérez. Un entendido en la materia que durante años fue el brazo fuerte de los movimientos portuarios a través de Murchison, hasta que conformó su propio emprendimiento. En septiembre del año pasado trascendió que Patagonia Estibaje, que estaba dedicada prácticamente en exclusivo al congelado, había comenzado a absorber mano de obra a través de un presunto acuerdo.
Se sabe que esta empresa ha sido también de los vínculos estrechos y de la peña “Guacha” de amigos del ex intendente Carlos Eliceche, con lo que podría entenderse que el cambio solo sería superficial.
La otra alternativa que suena fuerte, también está vinculada al siempre vigente Eliceche, y relacionada con Socia y Patagonia Estibaje y se denominaría “Transporte Ruta 40”, un derivado que regentearían los mellizos Perez, operadores deportivos y políticos también del ex intendente. Este sector con estas dos alternativas de empresas fuertemente identificadas con el ex intendente Carlos Eliceche, el verdadero `dueño´ de las ideas de poder a costa del condicionamiento de poderosos, cuenta con elementos para seguir manejando la `voluntad´ de los estibadores arriba del puerto y además poseen maquinarias y estructuras.
Sin embargo, todo indicaría que Aluar, no estaría dispuesta a mas `manipulites´ pudiendo literalmente salirse de tremendo entramado de una vez por todas a través de una empresa propia o un proveedor similar, sin tanta complicación de vecindad, no? De esto dependerá si la lucha declamada contra el narcotráfico sea real, o solo aparente. En serio, o en joda.

*Soy Juana de Arco, amiga de Juan de la Sota, fiel del Furia, y ceniza de tantos…