Yerno cura, suegro cuatrero

Días atrás, efectivos policiales de Puerto Pirámides detuvieron a dos personas, de 48 y 49 años, a unos veinte kilómetros del casco urbano, luego de que un productor agropecuario denunciara el robo de ganado en su establecimiento.
A partir de la exposición policial, se originó una investigación que culminó con la Policía interceptando una camioneta doble tracción color blanco, en cuyo interior se encontraron bolsas con ovinos faenados, a la vez que se secuestró una carabina calibre 22, con mira telescópica. Seguidamente, se dio intervención a la Justicia, que confirmó el hecho y se procedió al secuestro de los elementos, incluida la camioneta; además, se devolvió lo sustraído al propietario. Grande fue la sorpresa, luego de que las autoridades constataran que uno de los detenidos resultó ser nada menos que el suegro del empresario madrynense Omar “Cura” Segundo, quien se encuentra procesado en varias causas en las que interviene la Justicia chubutense. Según trascendió, el “Cura” le habría puesto a disposición un abogado defensor a su suegro, quien hasta entonces aguardaba la audiencia de control de detención y apertura de investigación en los Tribunales de la ciudad costera.

Ruralistas indignados

El caso es el que ocurrió el fin de semana cuando la policía atrapó en la Península a dos ladrones que habían robado en un campo de la zona y que a las pocas horas recobraron la libertad. Encima dicen que algunos ruralistas fueron a pedirle explicaciones a un fiscal y que éste les habría respondido que salieron rápidamente de la cárcel porque habían sustraído solo cuatro animales. Uno de los detenidos tiene varias caídas por delitos similares y antecedentes en la Justicia Federal.
El caso contradice claramente lo que el procurador General de la provincia Jorge Miquelarena les prometió a los ruralistas hace unos días; que instruiría a sus fiscales para que fuesen severos con autores de delitos de esta naturaleza para evitar que salieran fácilmente de la cárcel.
Ahora bien, dicen que estos sujetos no alcanzaron a estar ni 12 horas presos porque al rato de haber llegado a la Comisaría de Pirámides recuperaron la libertad. Y eso despertó la lógica irritación al llegar al conocimiento del ruralista afectado por el robo y de otros que tienen establecimientos situados en las inmediaciones, que más de una vez han sido víctimas de este tipo de ilícitos y que al otro día ven a sus autores sueltos cuando los atrapan.

Todos libres

Miriam Echave que tiene un campo en el centro de la Península es una de esas personas indignadas y habló del tema por Radio 3 AM 780. “La verdad que ya hace bastante tiempo que venimos teniendo inconvenientes como los tienen todos los campos de Chubut. Inclusive hay zonas en las que la gente se acobardó y se fue”, reveló. “El grave problema es que los encuentran con los animales carneados o en el acto delictivo y son dejados en libertad”, agregó.
Más adelante la ruralista opinó: “Creo que si la legislación no funciona hay que modificarla porque si no nos vamos a transformar en el lejano oeste”, dijo y agregó posteriormente “(…) En el caso de la Península, convengamos, que hay un solo lugar para entrar y salir, entonces todavía es más fácil de controlar”.
En otro momento del reportaje Echave dijo al aclarar que su campo es muy chico y que lo heredó de sus padres, “cuando uno escucha a los que viven en el campo en distintos lugares de la provincia que son atacados, que son atados, que han sido violentados de una manera que no se olvida más piensa que realmente estamos mal. Pero esto es porque cada uno no se hace cargo de la responsabilidad que tiene. He visto al gobierno ponerse firme en estos casos pero después al momento del allanamiento la orden la da un juez o un fiscal y si el sistema judicial tiene herramientas que no le sirven tendrá que hacer la reunión que corresponda con los legisladores y realizar los cambios que se necesiten. Pero no nos pueden pedir a los ciudadanos que vivamos encerrándonos cada vez más”, dijo.