Analizan devolver reintegros a la exportación de carnes

El gobierno nacional evalúa restablecer los reintegros a la exportación de carne vacuna, con una alícuota promedio del 5%, a partir del año próximo.
Cabe recordar que el reintegro a la exportación de carne estuvo vigente hasta que el gobierno de Néstor Kirchner dispusiera eliminarlo en noviembre de 2005. “Para la (exportación de) carne bovina, es una medida concreta y efectiva que redundará en beneficio de toda la cadena, mejorando de manera inmediata la competitividad de la industria frigorífica exportadora”, afirmó Daniel Urcía, de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra).
Para Urcía, la medida que promueve el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, “sirve para mejorar la performance de las empresas que se vieron afectadas por el aumento de costos internos y el valor de la materia prima”. Desde el sector privado también se descuenta que se dispondrá una prórroga respecto a la normativa que establece el sistema de registro.
Para la región al sur del río Colorado, la noticia también es positiva ya que un estímulo a las exportaciones determinará que un menor volumen de carne se comercialice al norte y por ende menos oferta llegue al sur lo que deberá ser compensado con producción local.

Llegan los beneficios para pymes

Luego de cuatro meses se reglamentó la ley 27264. La norma establece una serie de incentivos para pequeñas empresas. Allá por el mes de Julio se promulgaba la ley 27264, que instauró un régimen de fomento a las inversiones y beneficios impositivos para a las pequeñas y medianas empresas (pymes).
La ansiada reglamentación –decreto 1101/2016–, en la que se establecen los principales lineamientos para aprovechar los beneficios impositivos y hacer uso del régimen de fomento a las inversiones establecido por la ley que incluye: a) La eximición del impuesto a la ganancia mínima presunta para los ejercicios que se inicien a partir del 1/1/2017 –AFIP deberá establecer un procedimiento de acreditación y/o devolución de los anticipos del impuesto que se hubiesen ingresado por el período fiscal por el cual no resulta aplicable el gravamen–.
b) El cómputo del 100% del impuesto a los créditos y débitos bancarios –micro y pequeñas empresas– y/o del 50% –medianas tramo 1 industriales– del impuesto como pago a cuenta del impuesto a las Ganancias –comprende el impuesto sobre los créditos y débitos efectivamente ingresado hasta la finalización del ejercicio anual en curso–.
Además, el decreto reglamentó el régimen de fomento a las inversiones, para aquellas empresas que estén categorizadas como pymes a través de la página web de AFIP. Los incentivos ofrecidos son dos, por un lado, la posibilidad de computar como pago a cuenta en el impuesto a las ganancias el 10% del valor de las inversiones productivas, siempre que con anterioridad se haya cumplido con la presentación de una declaración jurada a través de la web de la AFIP, en la que se informan entre otras cuestiones, características de las inversiones a realizar.
El segundo incentivo es un bono de crédito fiscal por inversiones en bienes de capital y obras de infraestructura. El bono podrá ser utilizado durante el plazo de diez años, contados desde su emisión por parte de la Secretaría de Emprendedores y de la Pequeña y Mediana Empresa, la misma que, junto a la AFIP, establecerá los mecanismos necesarios para que el mismo pueda utilizarse para la cancelación de tributos nacionales, incluidos los aduaneros. Los datos muestran que 100% es el porcentaje del Impuesto a los Créditos y Débitos que las pymes podrán computar como pago a cuenta de Ganancias.

Hay nuevo reglamento para construcción con madera

El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ricardo Negri, acompañado de la subsecretaría de Desarrollo Foresto – Industrial, Lucrecia Santinoni, junto al secretario de Obras Públicas del Ministerio del Interior, Daniel Chain; y el presidente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), Javier Ibañez, anunciaron que en los próximos días entrará en vigencia la norma CIRSOC 601 para las construcciones en madera en territorio argentino.
Por su parte, Negri resaltó que «nace una gran oportunidad para el sector foresto – industrial, dado que es una de las industrias que más potencial de desarrollo tiene y de generación de fuentes de trabajo». Además, el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca afirmó que «la foresto – industria brinda un gran aporte al cambio climático ya que sólo una casa de 60 m2 construida en madera, fija 10 toneladas de carbono minimizando y contribuyendo a le emisión de gases causantes del efecto invernadero».
Durante su participación el Secretario también nombró otros de los beneficios que la foresto – industria aporta al desarrollo del país: la elaboración de papel marrón y el aprovechamiento de la biomasa para la generación de energía «en un momento donde la Argentina atraviesa un claro déficit energético», explicó Negri.
Las normas CIRSOC (Centro de Investigación de los Reglamentos Nacionales de Seguridad para las Obras Civiles) son reglamentos y códigos relativos a la seguridad, durabilidad y calidad de las estructuras y construcciones. Específicamente, la norma CIRSOC 601 que corresponde al uso de la madera como material para la construcción, iguala a ésta – en seguridad y calidad – en relación a los materiales usados convencionalmente en la construcción de viviendas en infraestructura.

Lanzan un plan para evitar degradación del suelo

El Ministerio de Agroindustria afirma que se «vienen tomando medidas respecto de la problemática de suelos desde el primer día, como por ejemplo la quita de retenciones a trigo y maíz, que contribuye a mejorar las rotaciones», destacó el Subsecretario en la apertura de la jornada. El resultado de estas políticas «ya es notable en el hecho de que tenemos más trigo y más maíz sembrados, de modo tal que alcanzamos la mejor relación gramíneas-soja de los últimos 10 años», destacó.
En este sentido, Urriza subrayó que uno de los motivos más importantes por los que se tomaron medidas en favor de las gramíneas tuvo que ver con que en diversos estudios referidos a la erosión de los suelos, la variable de mayor impacto atendió a la falta de rotación de cultivos.
El objetivo de la cartera nacional respecto del Observatorio es «cumplir el rol de coordinar las diferentes iniciativas público- privadas y formalizarlas con una mirada hacia dentro de la conservación del recurso y también desde lo global para reinstalar a la Argentina en el mundo, con mediciones serias que le permitan cumplir objetivos tanto en lo ambiental como al impacto que eso tiene en lo comercial», explicó el Subsecretario.
«Valoramos mucho la articulación y la interinstitucionalidad, este es el espíritu del rol que asumimos como Estado», aseveró. Al tiempo que recordó que el compromiso con la idea de creación del organismo surge del compromiso asumido con las provincias en el marco del Consejo Federal Agropecuario (CFA).
Entre las funciones centrales previstas para el Observatorio se encuentran la de disponer de información permanente y actualizada respecto de los parámetros de salud del suelo, que estará disponible para la articulación de políticas públicas. Como así también mejorar las bases de datos disponibles, y revalorizar la posición argentina en el plano internacional, en cuanto a la generación de datos y desarrollo de tecnologías de medición.
A partir de consignas como abordaje metodológico, regionalización y escala de trabajo, indicadores y umbrales críticos, ideas para la adopción de buenas prácticas y recursos disponibles, se planteó un trabajo en taller por regiones, a fin de alcanzar los lineamientos para la consecución de la iniciativa, junto a las recomendaciones para la toma de decisiones al respecto en base al aporte de más de 150 especialistas de diferentes regiones, a partir de lo cual se trazaron los lineamientos del Plan Nacional de Suelos Agropecuarios.