A raíz de las inclemencias climáticas por las intensas nevadas se dificultó el tránsito en la zona de Esquel así como también se dieron complicaciones en domicilios por congelarse las cañerías.
La nevada de junio fue mayor a la de julio en cuanto a intensidad pero no a rigurosidad dado que en esta última oportunidad se dieron temperaturas de 17 grados bajo cero. Durante el fin de semana algunas rutas no estuvieron del todo cortadas pero sí era necesario el uso de cadenas para circular, mientras que se dificultó la llegada de micros. Port ejemplo, un vehículo de Crucero del Norte tardó 44 horas en llegar de Buenos Aires a Esquel y a 20 kilómetros por problemas mecánicos no pudieron ingresar a la ciudad y tuvieron que hacerlo de manera particular. (ADNSUR)