La investigación por la muerte de la pequeña Zumara Berenice Orias, de un año y medio de edad, ocurrida hace casi tres años, sigue sin tener resolución y en una audiencia preliminar desarrollada en los tribunales de Trelew, el Ministerio Público Fiscal representado por el fiscal general Fabián Moyano solicitó la elevación a un nuevo juicio oral de la causa, imputando por homicidio culposo a sus padres Marcial Orias y Angélica Valenzuela.
El juez Marcelo Nieto Di Biase resolvió la elevación a juicio oral de esta causa, por lo que se deberá designar el tribunal correspondiente, rechazando la posibilidad para que deponga como perito el señor Clavel, declarando admisible el resto de las propuestas presentadas por las partes teniendo en cuenta el futuro debate.

Acusación

El fiscal relató que ambos padres, el 30 de noviembre de 2014 cerca de las 14:15 horas, se encontraban con sus hijos y un grupo de amigos compartiendo un asado en la chacra 123 de Trelew, en la ribera de un canal de riego en la calle Gobernador Costa, entre López y Planes y una verdulería existente en el lugar. En esas circunstancias, aseguró Moyano, los progenitores, violando el deber de cuidado de sus hijos menores y atento el peligro existente constando el canal de alto volumen y caudal de agua sin ningún tipo de contención para las personas, actuaron negligentemente al no adoptar una conducta apropiada para evitar el acercamiento, con el peligro consecuente que se corría.
Por otra parte, el fiscal hizo mención de la ingesta de bebidas alcohólicas en cantidad suficiente como para disminuir la percepción del riesgo en que se encontraban sus hijos con la cierta posibilidad de caer al canal. En este sentido, aseguró que se sentaron las bases para que la niña Zumara Berenice Orias Valenzuela cayera efectivamente y falleciera como consecuencia de la sumersión, lo que resulta imputable como resultado de conductas imprudentes y negligentes.

Calificación y elevación a juicio

La calificación es la de homicidio culposo, solicitándose un tribunal unipersonal, y si bien era postura de la fiscalía aplicar una pena natural sin llegar al debate, fue la propia defensa, ejercida por Javier Reuter la que pidió elevación a juicio del caso. Aclaró que de cualquier manera, y aún si se determina la culpabilidad de los imputados, el Ministerio Público Fiscal no pedirá penas para los mismos.
Durante la audiencia se ofrecieron las pruebas que presentarán durante el juicio cada una de las partes, y el defensor Reuter puso objeciones en la cantidad de testigos convocados que alcanzarían a treinta y siete personas. De todas maneras no pudo fundamentar la oposición expuesta, y además propuso la participación como perito del comisario Clavel, lo que fue rechazado por la fiscalía dado que en esta parte del proceso no se puede efectuar tal ofrecimiento, aunque sí puede convocarlo como posible testigo.