Un relevamiento realizado por el Ministerio Público Fiscal arrojó cifras que refieren a la cantidad de causas que ingresaron, en 2017, sobre violencia familiar y doméstica.
Concretamente, fueron 709 para el año pasado, contra unos 1.365 del año anterior, que ya había registrado un incremento del 20,2 por ciento frente a los 1.136 casos que hubo en 2015.
En otras ciudades vecinas, principalmente en Trelew y Rawson, este tipo de situaciones aumentó en un 21,8 y 14,3 por ciento, respectivamente, mientras que Sarmiento fue la segunda localidad donde más bajó la cantidad de causas (-43,3%).
Le siguen Lago Puelo, con un 16,9 por ciento menos de causas por violencia doméstica y familiar, Comodoro Rivadavia (-14,9%) y Esquel, que redujo la cifra en un 10 por ciento.
En total, Chubut registró un total de 3.579 causas de este tipo, es decir, un 15,9 por ciento menos que en 2016 (4.267); a pesar de que el número es menor, la suma de los casos se ubicó casi al mismo nivel que en 2016, donde hubo 3.551 causas, por lo que la variación general en los últimos tres años fue de tan sólo el 4 por ciento.

Variaciones locales y provinciales

En el caso de Comodoro Rivadavia, en 2015 hubo 1.022 casos, cifra que aumentó al año siguiente (1.144) en un 11,9 por ciento; sin embargo, en 2017, se ubicó en los 973 casos, mostrando una disminución real del 3 por ciento en tres años; es decir, un 1 por ciento por año.
En la localidad de Esquel, se registraron 157 causas por violencia familiar y doméstica en 2015; la cifra se disparó a 261 para el 2016, demostrando una suba del 66,2 por ciento, que se redujo un 10 por ciento para el 2017; sin embargo, en el último año, solamente hubo seis casos menos y, entre 2015 y 2017, hubo en realidad 78 casos más.
Para Lago Puelo, el panorama resultó un poco más alentador: 44 casos en 2015, 77 en 2016 (+75%) y 64 en el año que culminó.
Otro escenario destacable fue el de Puerto Madryn, que terminó el 2015 con 1.136 casos, aumentó la cifra a 1.365 para el año siguiente (+20,2%) y decreció a los 709, para finales del 2017 (-48,1%).
En Trelew, de 773 casos de violencia doméstica en 2015, la cifra ascendió a 905 para 2016 (+17,1%) y continuó en alza para el año pasado: 1.102 casos, elevando el incremento al 21,8 por ciento.
En Rawson se apreció algo similar; en 2015, los casos fueron 305 y, para el año siguiente, la ciudad capitalina registró 364 causas (+19,3%), con un total de 416 (+14,3%) para el fin de 2017.
Finalmente, la localidad de Sarmiento registró en 2015 unos 114 casos; al año siguiente, hubo 37 casos más y, para fines de 2017, el número fue de 61 casos menos, totalizando 80 y una baja del 43,3 por ciento.

Los casos en Madryn

En la ciudad del Golfo, comprendidos dentro de las categorías de “casos ingresados por violencia familiar o doméstica”, se registró un total de 16 incumplimientos de los deberes procesales y 42 episodios de “atentado, resistencia y desobediencia a la autoridad”.
Además, hubo 18 denuncias por abuso sexual agravado – estupro, más 37 de abuso sexual simple, uno de ellos en grado de tentativa; también, se registró un sólo caso de grooming (infracción al artículo 131 del Código Penal).
Los delitos contra la libertad sumaron 254: hubo 24 amenazas agravadas y 230 simples, mientras que hubo dos causas por “privación ilegítima de la libertad simple” y una por “vejaciones”.
A su vez, las violaciones de domicilio fueron 14, mientras que, dentro de los “delitos contra la propiedad”, el Ministerio Público Fiscal registró 27 causas por daño simple, cuatro por hurto simple y cinco por robo simple.
En la misma línea, hubo dos casos de abuso de armas, ambos por “tenencia y portación de armas de fuego”, un homicidio agravado, tres homicidios simples (uno en grado de tentativa) y 7 casos de lesiones graves.
Además, se registró un total de 237 casos de lesiones leves, más 8 “agravadas por el vínculo”.
Al total se le suman cinco causas por “incumplimiento de los deberes de asistencia familiar”, 11 casos en los que hubo “impedimento de contacto con hijos menores de edad no convivientes” y 11 violaciones a la Ley 26.485 “de Protección Integral a las Mujeres”.

Reconociendo la problemática

A mediados de 2017, con el objetivo de reducir la cifra de delitos denunciados de violencia familiar y doméstica, desde el Superior Tribunal de Justicia del Chubut implementaron “medidas urgentes”, que consistieron en guardias de Juzgados de Familia en toda la provincia; en este sentido, desde el máximo órgano judicial advirtieron que “resulta indispensable que, en lo inmediato, se adopten medidas de carácter general para todas las Circunscripciones judiciales de la Provincia del Chubut, tendientes a la protección urgente y preventiva de los derechos amenazados, vulnerados o violentados, sin que procedimientos de investigación ulteriores puedan obstaculizar el acceso a una respuesta oportuna y efectiva en favor de las víctimas de cualquier forma de violencia familiar o de género” y que “es necesaria una respuesta jurisdiccional que permita el dictado de medidas útiles, en la inteligencia que todo lo que impida o restrinja el acceso a la justicia de las víctimas, puede agravar su situación”.
A ello, sumaron que “la experiencia indica que existen muchos casos de violencia familiar o de género que se denuncian ante autoridades policiales que no logran el objetivo de obtener para la víctima, protección judicial urgente, oportuna y efectiva” y que “es menester establecer estándares generales para toda la Provincia que permitan un sistema multipuertas de rápido acceso e inmediata atención judicial de la situación de vulnerabilidad”.

Con urgencia

Las medidas implementadas por el STJ se constituyeron como dos acuerdos plenarios, uno de los cuales estableció que “la autoridad policial deberá, luego de receptada la denuncia por violencia familiar o de género, en todos los casos, cualquiera sea su modalidad o quien resulte víctima de ella, remitir en forma inmediata una copia de la misma al Juez de Familia en turno de la Circunscripción Judicial donde ella se formula”, agregando que “una vez recibida la denuncia procedente
de la autoridad policial, el Juez de Familia en turno deberá adoptar, de estimarlo pertinente, las medidas preventivas urgentes de protección y el régimen procesal establecido por las leyes, a fin de dar respuesta oportuna y efectiva al caso bajo juzgamiento”.
También, el STJ exhortó a los jueces “a ejercer el debido control de la eficacia de las medidas dispuestas” y a los jueces de Paz de la provincia “a hacer uso de las facultades legales otorgadas por el Artículo 7 de la Ley XV 12, por esta Acordada y por toda norma que se relaciona con esta materia”.

Juzgados de turno

En lo que refiere a las guardias en los Juzgados de Familia, vinculadas a cuestiones de violencia familiar y de género, el STJ dispuso, en junio de 2017, “que las Cámaras de Apelaciones de todas las Circunscripciones Judiciales de la Provincia, donde funcione más de un Juzgado de Familia, implementen un sistema de guardias para cuestiones de urgencia vinculadas con violencia familiar y de género”, estableciendo que “los turnos se distribuirán equitativamente durante todo el ario calendario, con el objeto de asegurar el pleno acceso a la tutela jurisdiccional, cuando el caso requiera la adopción de medidas urgentes en esas cuestiones”.
Además, se dispuso que “cuando el Juzgado de Familia sea único en su jurisdicción, permanecerá de turno durante todo el ario, con el objeto de asegurar el pleno acceso a la tutela jurisdiccional, cuando el caso requiera la adopción de medidas urgentes” y que los juzgados de turno “deberán contar con un teléfono de guardia, el que permanecerá abierto durante todo el lapso de tiempo que transcurra el turno”.