La primera semana de enero ha mostrado temperaturas y condiciones inmejorables para disfrutar de la playa y de actividades al aire libre. Pero la amplitud de horarios de exposición y el calor intenso no son buenas combinaciones cuando se producen excesos. La adopción de simples medidas de seguridad a la hora de viajar, usar siempre protector solar, beber abundante agua segura para evitar la deshidratación, y lavarse frecuentemente las manos son algunas de las recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación para disfrutar de un verano sin inconvenientes para la salud.
Desde la cartera sanitaria mencionaron que “para evitar accidentes es fundamental que todos aquellos que se desplacen en vehículos a los centros turísticos usen el cinturón de seguridad. En el caso de los chicos siempre tienen que viajar en la parte de atrás y, en función de la edad, asegurados en la silla correspondiente; además, se recuerda que el conductor no debe haber ingerido alcohol”.
Por otro lado, “también es importante señalar que es necesario el uso de casco en el caso de que se quiera andar en bicicleta, moto o cuatriciclo y no se debe circular por la playa en vehículos motorizados”, precisaron.
Cabe recordar que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta para la región, advirtiendo por las elevadas temperaturas que se registrarán en la zona del Valle, con temperaturas superiores a los 40 grados para el día de hoy, motivo por el cual recomiendan extremar las precauciones y recaudos.

Cuándo y cómo tomar sol

En lo que respecta a la mayor exposición solar y las temperaturas altas se pueden adoptar algunas medidas básicas para evitar golpes de calor, quemaduras y situaciones de deshidratación.
La exposición excesiva al sol “puede producir envejecimiento de la piel, cataratas y cáncer de piel, por lo cual es necesario evitar la exposición entre las 10 y las 16 horas y mantenerse en espacios ventilados. Además, se recomienda aplicar protector solar con factor de 30 o más y renovarlo cada dos horas y luego de salir del agua, además de utilizar ropas claras, anteojos de sol y sombrero”, indicaron los especialistas.
En el caso de los niños menores de un año, “no deben exponerse al sol”, remarcaron de manera contundente, indicando que “los chicos mayores de esa edad pueden estar sólo en horarios permitidos y con la protección necesaria”.

Hidratación y alimentos

La hidratación es otro de los puntos clave para evitar golpes de calor. Se recomienda tomar mucha agua durante todo el día, inclusive cuando no se tiene la sensación de sed y consumir alimentos frescos, como frutas y verduras. En el caso de los lactantes se les debe dar el pecho con mayor frecuencia y a los niños agua fresca y segura.
Hay grupos que potencialmente pueden verse más afectados por golpe de calor como las mujeres embarazadas, los bebés y niños pequeños; las personas mayores de 65 años; y quienes padecen enfermedades crónicas como, por ejemplo, afecciones respiratorias o cardíacas, hipertensión arterial, obesidad y/o diabetes, por lo cual tienen que aumentar los recaudos.
En cuanto a los alimentos, con las altas temperaturas aumentan las probabilidades de sufrir cuadros como intoxicaciones y diarreas, por lo que se solicita poner especial cuidado en el manejo y consumo de los alimentos, respetar la cadena de frío y evitar la exposición de los productos al calor. El lavado de manos con agua y jabón antes de preparar las comidas, después de ir al baño o cambiar a los bebés y al volver de la calle, es una medida fundamental para evitar estos inconvenientes.