Por Trivia Demir

Cuando se conformó la alianza Cambiemos, los más orgánicos y pragmáticos PRO dicen que no tuvieron en cuenta que en la UCR hay tantas líneas internas como dirigentes, y que darle uno o dos lugares en las listas “al radicalismo”, así genérico, significaría dejar a varios sectores afuera del armado, algo imperdonable para un partido que desconoce el concepto de unidad. Todo esto no tardaría de aflorar en colapsos y múltiples explosiones, tanto a nivel nacional como provinciales.
Para el macrismo -y también para los más pragmáticos lilitos de la Coalición Cívica- los reclamos aislados por uno u otro motivo de los referentes del partido centenario es un problema de radicales libres. Para la química, son átomos o grupos de átomos que tienen un electrón desapareado en capacidad de aparearse, por lo que son muy reactivos. La metáfora cuaja de lleno con la actualidad política que en general poseen los radicales del Cambiemos chubutense, sobre todo en el ámbito legislativo, donde vienen manejándose sin ningún tipo de coherencia con la línea que dicta la alianza gobernante a nivel nacional. Por caso, mientras Nación intenta cerrar filas con el gobierno de Mariano Arcioni quien además accedió a adherir al Pacto Fiscal, los diputados provinciales hacen todo lo contrario y ponen múltiples palos en la rueda del Ejecutivo en franca línea con los opositores del FPV.
Incluso intentan jugar la `individual´ en el tema minero que mañana llega para impulsar el propio ministro de Energía de la Nación, Juan José Aranguren. Esto bajo argumento de la desastrosa experiencia que tuvo el radicalismo en Esquel allá por 2003 cuando perdió la gobernación frente a Mario Das Neves precisamente porque José Luis Lizurume se empecinó en darle luz verde a los buscadores de oro cordillerano.
Sin embargo, detrás de esta pulseada están los intereses siempre vigentes del sector del cimadevillismo, explican los más conocedores de paño.

La primera parada de Juanjo

Así las cosas, dicen que el cambio de fecha de Aranguren tuvo que ver más con esta emboscada política interna que con las complicaciones que generaba el paro de Camioneros el próximo miércoles. En realidad, el ministro mantendrá una reunión interna en dependencias de la Fundación pensar en Trelew, donde se presume que habrá menos referentes PRO y más `radicales libres´, cuyo electrón `desapareado´ para decirlo químicamente sería el hoy cuestionado jefe de la Unidad AMIA, al borde de la extinción, el histórico Mario Cimadevilla.
Además estarán presentes los diputados con los que Cimadevilla opera políticamente en la Provincia, la diputada provincial de su íntima confianza, Jaqueline Caminoa, Eduardo Conde, y Manuel Pagliaroni.
Precisamente este último ha mostrado últimamente una posición inflexible respecto al tema que viene a flexibilizar Aranguren. “Desde el radicalismo durante muchos años hemos manifestado que no estaban dadas las condiciones de seguridad, ni las garantías sobre la situación ambiental para desarrollar la minería con los funcionarios y estructuras existentes, y que son quienes deben controlar una actividad compleja como lo es la minera”, señaló recientemente Pagliaroni agregando que esas condiciones hoy no han variado. El legislador opina que primero se debe dar un debate sobre el tema minero “en Cambiemos” para llegar “a una posición única”, agregando que en esa coalición, el PRO está a favor de la minería, pero el radicalismo `ni´. “No es cuestión de un `no´ absoluto, ni de un `sí´ en el que se facilite que unos pocas empresas se hagan millonarias y no se hable de las condiciones y garantías de desarrollo de la provincia y las comunidades regionales”, trtaó de labrar el mes pasado por radio, en una argumentación que deja bastante claro que todo podría ser razonablemente `negociable´.

La antesala a otra pulseada interna

Esta previa en Chubut se presenta justo antes de la reunión que el partido centenario tendrá en Buenos Aires, donde se supone que analizará su estrategia parlamentaria y la marcha de la economía. Esto será precisamente mañana martes en Buenos Aires, cuando la Unión Cívica Radical que forma parte de la alianza Cambiemos, y permanentemente pide más injerencia en el Gobierno, debatirá la agenda que impulsará como parte del oficialismo desde el próximo primero de marzo.
En ese marco, se darán a conocer informes sobre la situación económica del país. Allí, el gobernador mendocino Alfredo Cornejo que asumió en diciembre la jefatura del radicalismo, encabezará la primera cumbre del año de la UCR.
Será a nueve días del inicio de las sesiones ordinarias cuando las autoridades del Comité Nacional de la UCR, junta a sus diputados y senadores para armar una estrategia parlamentaria para este año.
Este encuentro de mañana será el primer desafío que tendrá Cornejo, uno de los socios centrales de la coalición gubernamental Cambiemos, desde que asumió en diciembre la jefatura del radicalismo.
En la reunión, que se realizará desde la 10 en un hotel céntrico de la ciudad, las autoridades y legisladores de la UCR escucharán informes de economistas y expertos internacionales, y debatirán la agenda que tendrá por supuesto visos interesados en términos políticos.

Dosificando la reactividad

La jornada, organizada por el presidente del bloque radical, Mario Negri, se desarrollará en dos etapas: una a la mañana con paneles de economía donde expondrán los economistas Alfonso Prat Gay y Levi Yeyati, y otro de relaciones internacionales en la cual hablará, entro otros especialistas, Carlos Perez Llana.
A la tarde será el turno del debate sobre la estrategia parlamentaria y se esperan discursos de cierre de Negri, del jefe del interbloque del Senado Luis Naidenoff y del gobernador Cornejo, en lo que será su primera cumbre como jefe del radicalismo.
En cuanto a la estrategia parlamentaria, voceros radicales señalaron que -tras las convulsionadas jornadas de diciembre donde se aprobaron las reformas previsionales, tributaria y un conjunto de leyes económicas- ahora se debe pensar solo en iniciativas en las que se pueda alcanzar un consenso.
“No podemos volver a vivir los sucesos de diciembre y tenemos que armar una agenda que esté centrada en aquellas iniciativas donde se pueda armar consenso con el justicialismo y otras fuerzas políticas”, aseguró a Télam un legislador oficialista.
En ese contexto, la UCR está armando -al menos en Diputados- una agenda de “índole social”, en la que se incluyan debates vinculados a las demandas de los derechos de las mujeres y no se descarta abordar el controvertido tema de la despenalización del aborto, que divide las aguas en el oficialismo y la oposición, así como temas de salud, y el régimen penal juvenil.
Las fuentes consultadas señalaron que el radicalismo tiene algunas diferencias con el régimen penal juvenil que está diseñando el Ministerio de Justicia, ya que la mayoría de los diputados y senadores radicales no coincide con la baja de la imputabilidad, en sintonía con la posición que tiene el experto Ricardo Gil Lavedra.
Desde el radicalismo sostuvieron que, si bien tienen un número más favorable que hace dos años atrás ya que ahora alcanzan los 108 bancas, todavía están muy lejos de poder imponer un temario con lo cual deben abordar consensos porque no alcanzan la mayoría para aprobar un proyecto.
También señalaron que los acuerdos serán más complicados cuando después de mitad de año los partidos políticos empiecen a discutir su estrategia con la mirada puesta en las elecciones presidenciales del 2019.
La cumbre radical, al igual que esta mesa chica de hoy en Trelew, se realizará a nueve días del inicio de las sesiones ordinarias, prevista para el 1 de marzo. A nivel nacional, mientras el oficialismo y la oposición negocian la conformación de las comisiones. En ese marco, Cambiemos sumará nuevos cuerpos asesores como Salud Pública, que será ocupada por la macrista Carmen Polledo; y Agricultura, hasta diciembre en manos del massismo y donde será ungido el radical entrerriano Atilio Benedetti.

Fuentes: LPO, IP, LU17, propias