Fueron sólo cuarenta minutos de discurso, lejos de las cuatro horas que solía hablar Cristina Kirchner, pero a Mauricio Macri le alcanzaron para anunciar varios temas candentes que empujará en el Congreso en 2018, un año sin elecciones, pero con un panorama económico incierto.
Macri defendió el modelo económico gradualista y rechazó un «shock de ajuste»
Tal vez por eso y por los incidentes de la reforma previsional, la economía fue el rubro menos abordado por el presidente y claramente no dominará su agenda parlamentaria.
Excepto con una ley que pidió como “prioridad: la reforma del mercado de capitales, llamada de «financiamiento productivo”, aprobada en Diputados en noviembre.
Macri le pidió al Senado sancionar a ley de mercado de capitales, que permite comercializar derivados financieros. También la extinción de dominio, frenada por Pichetto. Enviará una ley de ética pública que ya incomoda a Cambiemos.
Los Bancos quieren desprenderse cuanto antes de las carteras de créditos UVAs, de dudosa cobrabilidad porque se vienen capitalizando por encima de la inflación y el dólar, consignó LPO.
El presidente celebró el boom de hipotecarios, pero dijo que sólo puede seguir si el Senado sanciona la ley de mercado de capitales. Esperará un tiempo antes de apelar a otro DNU.
Un posible punto de tensión con el Congreso, incluso con el oficialismo, será la ley de «Integridad Pública», conocida como «ética» pública, anunciada por Laura Alonso y con la restricción para nombrar familiares en los tres poderes del Estado.
No será un tema fácil, porque en ambas Cámaras es habitual cruzarse los familiares de los legisladores como asesores full time. Casualidad o no, delante de ellos Macri elogió su reciente medida anti nepotismo.

Cambio de estrategia

La reforma laboral, que Cambiemos no pudo tratar en el Senado, volverá a debatirse partida en varios proyectos, aunque Macri sólo habló de uno: el blanqueo, que era el primer capítulo de la iniciativa cajoneada.
Consiste en facilitar mediante facilidades impositivas la regularización de empleados no registrados, uno de cada tres según Macri.
Los sindicatos suelen ser reticentes, porque temen que los empleadores se acostumbren a esperar estas leyes y se interesen menos por blanquear a sus empleados, como ocurre con los evasores que aguardan las moratorias impositivas para ponerse al día.
Macri confirmó que enviará la ley de telecomunicaciones, en medio de una dura disputa entre las telefónicas y funcionarios de su Gabinete. Ratificó el blanqueo laboral con un premio: una ley para reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres.
Sí anunció dos aspectos capaces de descomprimir el debate: la extensión de la licencia por paternidad y una ley para evitar discriminación de salarios para las mujeres. «Según el Indec, cobran 30% menos», se indignó el presidente y ganó aplausos, como buscaba.
Tal vez uno de los platos más fuertes del Congreso en la era Cambiemos será la nueva ley de telecomunicaciones, que en Diputados ya creían demorada para 2019 pero el presidente la anunció para los próximos meses.
Se trata nada menos que del marco regulatorio para las telefónicas y proveedores de televisión como Cablevisión y el Grupo América, motivo de una fuerte interna en el Gobierno, donde ya planean una ley corta o breve para habilitar a las telefónicas a brindar televisión satelital y ofrecer cuádruple play.
La ley central, dijo Macri, protegerá a «cooperativas, empresas pequeñas, medianas, grandes, tanto nacionales como internacionales, participen activamente de la conversación para garantizar la neutralidad de las redes y la pluralidad de los contenidos».

Otras iniciativas

Habrá varias leyes penales, como reforma al Código, «que está viejo, desordenado y emparchado mil veces», dijo Macri. Un comité de expertos la está reescribiendo y la última palabra la tendrá el Congreso, al igual que en el nuevo Código Procesal, con la misión de empoderar a los fiscales en el proceso de investigación.
El presidente dejó otro reclamo al Senado: sancionar la ley de extinción de dominio, que permite expropiar los bienes adquiridos por corruptos y narcotraficantes. Miguel Pichetto exige más solidez jurídica al texto aprobado en Diputados.
Aún con nuevo Código, habrá otros parches penales y algunos rimbombantes, tal vez ninguno como la habilitación del aborto antes de las 14 semanas de embarazo, que se presentará el 6 de marzo y Macri pidió a sus legisladores no cajonear y «votar a conciencia».
«Hace 35 años que postergamos este debate. Yo estoy a favor de los debates maduros y responsables que como argentinos tenemos que darnos», celebró y anunció que acompañará el debate con medidas preventivas al embarazo adolescente no deseado.
Anticipó una ley para penar con prisión por delitos viales, como manejar alcoholizado, «bajo el efecto de las drogas, o superando ampliamente la velocidad permitida».
Y otra que permita publicar las escuelas con menos nivel educativo, según la evaluación Aprender, cuyos magros resultados «fueron la estadística que más afectó», confesó Macri.

Arcioni en primera fila

El gobernador Mariano Arcioni asistió este jueves a la 136ª Apertura de Sesiones Ordinarias del Congreso Nacional que encabezó el presidente de la Nación, Mauricio Macri, y tras el mensaje brindado por el mandatario nacional ante la Asamblea Legislativa destacó la voluntad de diálogo que continúa manifestando el Gobierno de la Nación, aunque cuestionó la falta de obras para Chubut y la Patagonia en el Presupuesto 2018. “Vamos a seguir defendiendo con fuerza y convicción los intereses de nuestra provincia y de nuestra región. La Patagonia ha sido postergada por el Gobierno Nacional en materia de infraestructura” dijo el mandatario al retirarse del Congreso Nacional.
Al ser consultado por la prensa, Arcioni subrayó “el mensaje esperanzador y conciliador que ha enviado el presidente de la Nación” y en ese punto expresó que “estamos de acuerdo, porque nosotros también apostamos al diálogo permanente como forma de construcción política. Y de hecho debemos decir que siempre hemos encontrado las puertas abiertas en el Gobierno Nacional. La relación continúa siendo buena, a pesar de algunas diferencias que tenemos”, indicó.
“Como gobernador de Chubut hoy debo hacer una crítica constructiva porque en el Presupuesto 2018 finalmente se incluyeron muy pocas obras de infraestructura para Chubut y la Patagonia” y en ese marco observó que “se prioriza a las provincias más pobladas, que en general ya tienen una infraestructura más desarrollada, y se posterga a la Patagonia y a otras regiones del país que también necesitan obras públicas para promover con mayor volumen la actividad económica mejorando integralmente su infraestructura social, habitacional y productiva”.
“Vamos a seguir defendiendo con fuerza y convicción los intereses de nuestra provincia y de nuestra región en todos los ámbitos políticos e institucionales, porque Chubut y la Patagonia le han aportado y le siguen aportando mucho al país, y recibimos muy poco a cambio. Es cierto que se están haciendo algunas obras con financiamiento nacional en Chubut, pero no son suficientes, necesitamos más”, reclamó el Gobernador al resaltar que “el diálogo con el Gobierno Nacional sigue abierto. Siempre han escuchado nuestros reclamos. La relación es buena. Pero llegó el momento de que las palabras se transformen en hechos y en mejoras concretas para nuestra provincia y nuestra región”, concluyó.