Por Alejandro Lodes

‘Ellos’ están aquí buscando encontrar o ser encontrados. Su corazón con cada latido evita que pase desapercibido, pero él no puede controlarlo y sintiendo un hormigueo en el estómago se pone más nervioso aún.

La obscuridad inunda el callejón de los sueños. Una sombra lo sigue y por un dulce perfume sabe que es Ella.

– “¿Para qué querrías mi inocencia? ¿Qué harías con ella?” – Pregunta mientras el miedo lo paraliza por completo.
– “Yo no soy quien ni nadie para robarte tu inocencia. Robarla no me serviría para nada” – La sombra responde y desaparece por el camino.

Las noches pasan, y aunque podría tomar varios caminos para llegar a casa, es seducido a seguir por el mismo camino. Desde el interior de una casa suena una canción, y como si palabras salieran de su boca canta “Lo único que no puedo resistir, ¿Puedes leer las señales?¡Te tengo en la mira!”. Entonces descubre no ser la presa sino el cazador, es amor lo que siente por ella.

Una de las formas de convertirse en vampiro es ser mordido por uno de ellos, pero la conversión está sujeta a una decisión y él lo estaba deseando.

“Todo lo que puedas imaginar…”- Lee en un papel tirado en el piso, y es entonces cuando ella aparece frente a él mágicamente.
“¡Ya estoy listo! Ahora puedes morderme”- Dijo mientras inclinaba el cuello con una sonrisa en su cara.

Asustada da un paso hacia atrás diciendo “¡No soy un vampiro! La vida aquí me hizo perder totalmente la inocencia, pero no soy quien tú crees”.
“Disculpe señorita, estuve leyendo muchas novelas últimamente. Nuestras vidas se cruzaban en este callejón y creí que era obra del destino” – dijo buscando aquel papel para justificarse, pero para cuando lo encontró ya se había retirado.

Inclinó su gorro para tapar sus ojos llorosos, ya que la vida le había dado otra cachetada, aceleró su marcha y decidió nunca más pasar por ese callejón. Luego de muchos años logró juntar coraje para leer aquel papel nuevamente. Se puso los lentes para ver de cerca y leyó en voz alta “Todo lo que puedas imaginar es real”