Sobre las primeras horas del lunes, personal policial, de la Dirección de Tierras del Municipio, de la Policía del Chubut y la Subsecretaría de Protección y Prevención Ciudadana, frustró un intento de usurpación en una zona considerada “inhabitable”, debido a sus características demográficas; precisamente, las precarias casillas estaban ubicadas en las inmediaciones de Periodistas Chubutenses y Domecq García, al oeste de la ciudad.
Dos construcciones precarias debieron ser desarmadas; una de ellas, por parte de un grupo de residentes de Puerto Madryn, mientras que la otra había sido levantada por un albañil, quien dijo haber vivido “durante un año en una carpa, con mi mujer y con mi bebé”, una postal alarmante que da cuenta de la crisis habitacional que subyace en algunos sectores de la ciudad, principalmente en los más periféricos.

Vivir en la calle

Por su parte, uno de los vecinos obligados a derribar la casilla, Kevin Castro, contó, en diálogo con el Diario, que “dicen que acá está prohibido edificar, pero lo que yo veo es que me están sacando mi terreno, porque vine acá, estuve toda la semana, y no tengo dónde estar”, a la vez que agregó que “fuimos entre todos los vecinos a (la Dirección de) Tierras, nos dijeron que teníamos que esperar, pero nos mienten y no nos anotan, nos dejan en espera y no nos llaman”.
A ello, sumó que “no podemos estar esperando a que nos llamen y que eso no pase” y, consultado sobre su lugar de residencia hasta entonces, respondió que “estaba viviendo en la calle, dando vueltas por ahí; a veces me quedaba durmiendo en el basural y ahora tenía mi rancho, pero me lo tiraron”.

“Meses” de espera

Sobre el operativo que tuvo lugar alrededor de las siete de la mañana del lunes, contó que “nos dijeron que esto era propiedad privada, que por acá pasaba un caño o algo así y nos sacaron, pero yo necesito el terreno, no tengo ayuda de nadie”.
En cuanto a la espera, señaló que “fueron meses, un montón, y como no me dieron respuesta, me vine directamente; no tengo otra forma de ‘activar’, sino no me van a dar nada; vinimos con todos los vecinos”.
Además, remarcó que “soy chubutense, de Puerto Madryn” y precisó que “había más ranchos, pero los tiraron la semana pasada; el mío lo tiraron, lo armé de vuelta y me lo volvieron a tirar”.

Oriundos de Madryn

Otro de los vecinos que participó de la ocupación de tierras, Fernando Torres, se encontraba con su esposa y su bebé, y relató: “Nosotros agarramos el terreno porque nos cansamos de mandar cartas a Tierras, ya hace casi dos años, nos cansamos de escribir. Cuando vamos, nos dicen que todavía no hay respuesta y que no hay lotes disponibles, pero en el barrio Perón hay varios terrenos, hice lo mismo allá y me sacaron igual”.
Además, comentó que “fuimos personalmente al departamento de Tierras, pero nos cansamos de ir y que no nos den respuesta, a esto nos lleva”.
En este ámbito, puso en relieve que “soy de acá, mi mujer y mi hijo también, y viene la gente de afuera a agarrar terrenos y se los dan, mientras que nosotros, que somos de acá, nos cansamos de hacer las cosas bien y no tener respuesta”.

Sin respuesta

Torres, entre lágrimas, contó que “hace un año que vivimos en una carpa, no es bueno; uno se cansa de todo esto, hace rato estamos pidiendo y hacemos todo por las buenas, pero no nos hacen caso” y explicó que “trabajo en una pesquera y soy albañil, pero ahora terminó la temporada de langostinos y ‘hay que seguir’”.
Sobre este punto, anticipó que “siempre que vamos nos dicen que no hay respuesta, pero no nos dicen ni cuándo ni dónde, da mucha bronca, y hasta cuando estaba el gobernador Das Neves escribimos, y nos derivaron a Trelew; por qué, si somos de acá”.

“No pueden seguir usurpando”

En otro orden, la titular del área de Tierras, Vanesa Mattei, comentó que “se detectó que estaban usurpando sobre Periodistas Chubutenses y Domecq García, zona por donde pasa un colector y en la que no pueden estar ubicadas (las casillas), a la vez que es una zona inundable, por lo que se les dijo que se retiraran”.
Sobre el desalojo y posibles complicaciones ocurridas en el fervor del operativo, la funcionaria aclaró que “la gente tal vez no se quiere retirar, por lo que se les explica que no pueden seguir usurpando, ya que de ser así, de acuerdo a lo que dice la Ordenanza, ingresan a un registro de usurpadores y no pueden acceder a un lote social por el término de diez años”.

Dependen de la disponibilidad de terrenos

En cuanto a lo manifestado por vecinos respecto de la espera para que se les asigne un lote social, Mattei explicó que “todo depende de que tengamos disponibilidad de tierras; justamente, todas las zonas que se están usurpando son aquellas donde no hay asentamientos, pero porque no pueden estar ubicados, por lo cual tampoco se pueden fraccionar para hacer un loteo social; entonces, dependemos de tener disponibilidad de tierras para ir ubicando a la gente que está anotada”.
La titular de Tierras sostuvo que “se los va anotando, se tienen que presentar en la Dirección y se los va inscribiendo a medida que se van presentando; se han ido dando soluciones, y si dependiera del Municipio, se ubicaría a toda la gente, pero hay zonas donde no se pueden estar ubicando y ésta es una de ellas”.

Cómo es el orden de prioridad

El viernes pasado también hubo un intento de ocupación de tierras: “Había una sola construcción sola, pero estaban demarcados unos veinte lotes”, precisó Mattei, agregando que fueron dos casillas las derribadas el lunes.
En cuanto a la prioridad de quienes se inscriben según la composición del grupo familiar, precisó que “se le está dando prioridad, en todo caso, a aquella gente que tiene chicos discapacitados, pero más prioridades que esas no tenemos”.