Por Javier Arias
javierarias@eldigito.com

Existen preguntas que jamás tendrán respuesta. Es así, no hay muchas más vueltas, querido lector, nunca sabremos, por ejemplo, por qué el gato del vecino siempre viene a nuestra ventana a maullarle a su amada, por qué las ruedas del coche están perfectas hasta que decidimos salir de viaje y se desinfla una, o por qué esa señorita de pantalón plisado del negocio de enfrente no nos da ni la hora. Preguntas que si bien no nos cambiarían la vida saber su respuesta –bueno, la de la señorita del pantalón plisado en una de esas sí- bien que nos traerían al menos un poco más de paz a nuestro espíritu.
De esta forma nadie nos podrá responder por qué cornos el único rey sin bigote es el de espadas y mucho menos revelar qué nos lleva a apretar más fuerte los botones del control remoto cuando se está quedando sin pilas.
¿Por qué la bebida es bebida si no la bebimos todavía? Y si los triples son los sandwiches con tres capas de pan, ¿por qué a los que tienen dos los llamamos simples?
Tampoco podremos esperar mucho si consultamos por la otra mitad de Medio Oriente, de la misma forma que sólo obtendremos silencio cuando preguntemos dónde cornos están las malditas medias que dejan nuestros pares huérfanos, debe existir una dimensión escondida donde van a parar todas esas medias, guantes y todo aquello que viene de a dos.
¿Y si los hombres somos todos iguales, por qué nos sigue sin dar bolilla la mujer del pantalón plisado?
Y hablando de iguales, ¿por qué las pilas son doble A y triple A, ¿es que las B dan mala suerte?
Si hablamos de meteorología vamos muertos, cuando salimos con paraguas, no cae una gota, cuando sacamos los guantes de nieve termina lloviendo, cuando salimos sin campera, refresca y cuando calzamos el pulóver, no ahogamos de calor, ¿es que habrá alguien que nos espía detrás de la puerta para ver cómo salimos vestidos? Y hablando de lluvia, ¿me puede decir usted, atento lector, qué ganamos corriendo si adelante sigue lloviendo? ¿Y por qué levantamos los hombros, será que el cuello es especialmente vulnerable a las gotas de lluvia?¿O por qué cuando las madres tienen frío sus hijos tienen que abrigarse?
Otra pregunta que hace de nuestras vidas un pequeño suplicio es no saber por qué cuernos siempre la caja de al lado es la que más rápido avanza.
O si no,¿por qué cuando se nos cae una tostada siempre lo hace del lado de la mermelada?
Un dato que siempre me ha puesto nervioso es no entender del todo por qué los médicos llaman “prácticas” a sus trabajos, ¿no necesitarán más ensayo antes de que me toque a mí? Y hablando de vida o muerte, ¿qué haría usted, amigo lector, si un día se cruzara con un animal en vías de extinción que está comiendo una planta también en peligro de extinción?
El problema mayúsculo es cuando miramos hacia la psicología, porque allí nos quedamos con un montón de preguntas rebotando contra las paredes, por ejemplo, ¿si un esquizofrénico también es paranoico, tendrá miedo de estar persiguiéndose a sí mismo? ¿Y habrá tomado rehenes el que escucha voces y decide suicidarse?
Si tanto criticamos la guerra sucia, ¿es que preferimos la guerra limpia?
¿Por qué debajo de los asientos de los aviones hay chalecos salvavidas y no paracaídas? ¿Será para ir amortiguando el golpe?
¿Y si un camaleón se mirara a un espejo, cambiaría de color hasta volverse completamente loco?
Otra pregunta sin respuesta es por qué al doctor Banner, cuando se convierte en Hulk, se le rompe toda la ropa menos los pantalones, ¿será que tiene una tercera personalidad que le gustan las calzas de lycra?
¿Será verdad que al principio el canario Piolin de las caricaturas de Warner Brothers era un pajarito bebe sin plumas hasta que lo censuraron e hicieron que le pusieran plumas porque se veía desnudo? ¿O que hay una ciudad llamada Roma en cada continente?
Dicen que Shirley Temple siempre tenía 56 rizos en su cabello, ¿había quien se los contara?
¿Por qué los bailarines de ballet andan siempre en puntas de pie? ¿Será que no se quieren manchar las medias? Y ya que estamos ¿hace falta realmente que usen esas medias?
¿Por qué a las sentencias de los jueces las llaman “fallos” y por qué en los bancos siempre hay más ventanillas que cajeros?
Mirando televisión tendremos innumerables dudas, ¿por qué Superman lleva los calzoncillos por arriba de los pantalones, por qué a Tarzán nunca le crece la barba, o por qué hacen ruido las explosiones de las astronaves si en el espacio sólo hay vacío? ¿O por qué Tribilín habla y camina en dos pies y Pluto en cuatro y se la pasa ladrando, no son los dos igual de perros?
Los pilotos kamikaze, ¿usaban casco?
¿Por qué dormir plácidamente se comparar a dormir “como un bebe” cuando mi bebé se levanta cada hora y media?
¿Cuál es la gracia de subirse a un edificio muy alto para poner monedas en un prismático y volver a mirar las cosas de la calle más cerca?
¿Quién fue el primero que se dio cuenta que la leche de vaca era buena?
¿Cuál es el extraño motivo que las tostadoras de pan tengan la opción más fuerte que sólo quema las tostadas? Y hablando de electrodomésticos ¿por qué la heladera tiene una lucecita y el freezer no?
Y la pregunta del millón ¿se apaga cuando cerramos la puerta? ¿Tendrá algo que ver los pantalones plisados de la señorita del negocio de enfrente?

Nota: Información base recopilada de la página web http://www.soygik.com y http://bepop.com.ar