El integrante de la cúpula de la CGT Héctor Daer había anticipado ayer que era «muy probable» que la central obrera convocara a otra medida de fuerza nacional «antes de fin de año». Finalmente, los cegetistas ratificaron el quinto paro nacional contra el gobierno de Mauricio Macri.
Las autoridades de la central obrera habían advertido la huelga general tras concretar que el «Gobierno no cambia el rumbo». Más temprano, el secretario general del gremio de Sanidad alertó que el Ejecutivo «fue de rodillas a buscar al FMI» y que «no tiene más margen de maniobra».
Así lo manifestó el sindicalista en declaraciones a FM La Patriada, donde insistió en que «la síntesis del peronismo tiene que ser con todos adentro» y advirtió que la ex presidenta Cristina Kirchner «representa a una parte muy importante del peronismo».
«El peronismo unido hoy gana en primera vuelta», sostuvo también Daer, al tiempo que señaló: «Si este gobierno es reelecto viene por los derechos de los laburantes». Carlos Acuña fue quien confirmó el quinto paro de la central obrera contra la administración de Cambiemos. Si bien la fecha está en debate, la medida se llevará a cabo en las próximas semanas.
«En noviembre vamos a un paro general de 36 horas con movilización», confirmó Acuña y agregó: «La CGT no es débil para nada. Tiene la mayoría de los gremios», enfatizó el dirigente en diálogo con AM 530. La decisión tiene que ver con la vuelta al FMI, el ajuste que implicó y que no para de azotar al bolsillo de los trabajadores y los sectores más vulnerables del país.
De modo que la polémica política energética que impulsa Cambiemos y que implicó recientemente los nuevos aumentos del gas, el impacto de la escalada inflacionaria y el fallido pedido de detención de Pablo Moyano aceleraron la huelga. Ante esto último, la CGT salió a responder al Gobierno ante un posible encarcelamiento del hijo del ex dirigente cegetista y reclamó públicamente el cede de las «persecuciones» políticas.