NOTA DE OPINIÓN

Sistema Natural-Turístico de la Provincia del Chubut, “50 Años de historia de algo con identidad Patagónica“

Por Antonio Torrejón

Nos preguntamos, ¿Por qué se edita y, se lee con tanta avidez historias patagónicas? Esto sucede porque los patagónicos estamos en un proceso de autoconciencia, la etapa de búsqueda y descubrimiento de lo que comúnmente denominamos “identidad” mejorando pacientemente, los niveles de –calidad-.
Toda identidad tiene que ver con la pertenencia, con la pregunta por nuestro lugar en el mundo; el lugar, la estación o la patria donde podamos desarrollar en plenitud nuestra existencia. Somos los que buscamos en el turismo, cambio via el trabajo el esfuerzo sostenido y la transformación, no para el subsidio.
Si la literatura argentina tardó tres siglos para encontrar su propia voz, los patagónicos deberíamos comprender que una tradición no se construye en un par de generaciones. Yo y mi señora ya superamos en nuestra historia las 3 generaciones de los NYC, de estas tierras, de allí la apuesta enfrentada.
Los patagónicos estamos rompiendo el velo paternalista de la “identidad nacional”; descubriéndonos en primer término y prioritariamente como patagónicos sin más, es decir, Gente del Sur, de la Argentina Austral.
El término identidad expresa un concepto filosófico idealista que tiene que ver con un fenómeno cuyas características son la permanencia invariable y continua en el tiempo, es decir con algo estático y eterno. Los Patagónicos comprendemos que es posible cuidar, “sin cambiar de dueños, o expropiando”, Lo esencial es cambiar cierta forma de pensar y actuar. Llama la atención en el mundo, que en este Sistema de Ecoturismo Provincial, nunca SE expropio –un solo metro de tierra- Se le explico en la Asamblea de la UNESCO-Paris, 5-07-1999, que para los Patagónicos es imposible el “Cambio Ambiental”, sino no hay una mayoría de convencidos, que armonicen sus CONVENIENCIAS, prioridades y sustentabilidades. Ahora bien ¿desde esa identidad procuramos transformar, la Patagonia, nosotros como patagónicos? Será un proceso lento el nuestro, pero será de mayor aporte que el de las “cajas de Oro”, o de las arbitrariedades, contra quienes son pobres y no han podido ser asociados a procesos de cambios sustentables.
Los Patagónicos hemos sido de los últimos territorios en integrar la soberanía Argentina. Durante los siglos XIX y XX; así se hizo el definitivo poblamiento c0n europeos y etnias vecinas todas ellas impregnaron con sus tradiciones, costumbres, las actuales formas de vida aquí en el Sur.
Esta pluralidad de factores genéticos nos está reflejando el arco iris humano que aquí vive y trabaja. Ahora bien: ¿Qué sería lo más genuino de nuestra vida en común? ¿Cuáles serían los rasgos diferenciales nativos formadores de idiosincrasia? ¿No serían acaso los afectos, las energías generadoras del sentimiento de pertenencia y de una percepción diferente del mundo, aquello que produce identidad? No ha sido fácil ante los pequeños grupos de especuladores salvar muchas situaciones, pero de la forma que crecen los comprometidos con las “nuevas conductas”, verán que cada día nos IRA mejor.
Dos etapas de “gestión y esfuerzos desinteresados de bien común, fueron los que acortaron el camino al éxito. 1955/1965, los deportista amantes del mar, de Madryn y Trelew, fundaron el Club Náutico Atlántico Sur, avanzamos con la instalación para el “turismo submarino”,que fue la oferta, que nos hizo diferentes, al sur de Florianapolis-Brasil. La pesca deportiva de altura, marco otro seguro disfrute y la total diversificación para el país de la oferta que al norte de la latitud de Chubut, eran AMANTES Y RECEPTORES del verano de” Sol y Playa”, que nosotros convertimos en una oferta de “sol, playa, mar activo y fauna marina”
1965/1975, Chubut, con la oferta de todas las estaciones con “Mar y Fauna”, genero un destino competitivo de “3.000 puestos de trabajo permanentes”, subiendo de 700 camas a 10.000, en la Comarca: Valdés-Valle Inferior” , pasando a tener “sin estacionalidad” un turismo de todo el año, solo superado por Cataratas del Iguazú y la Ciudad de Buenos Aires
1966, 6 de enero, habilitamos el “Primer eslabón Eco turístico” del Sistema de Turismo y Áreas Protegidas del Chubut, “Punta Loma”, lo que presento algo inédito, de lobos, y avifauna para Latinoamérica, desde una jurisdicción “Federal-Provincial”.
1968, conseguimos, -explicada nuestras intenciones y búsquedas-, que la Administración Nacional de Parques, nos asistiera desde el Laboratorio de Vida Silvestre, habilitado frente a la Isla de los Pájaros, con un profesional en manejo de fauna, Prof. Juan Daciuk, para dar continuidad a este trabajo y ampliarlo, gestionamos ese año a la Asesoría Científica de Presidencia de la Nación, Dr. Mariano N. Castex el pago de la continuidad con los sueldos. La visita evaluativa de dicho profesional al Chubut, significo que nos instalaran un programa de “Geo-helio–fisica de San Miguel en Puerto Madryn, y por el crecimiento, oficialmente se creara el programa de la Conycet-Centro Patagónico de Estudios Científicos-Cenpat, EN 1970.
El Cenpat asistió los programas de: “Toninas Overas de la Desembocadura del Rio en Rawson”, Avifauna en Punta Tombo, Cabo Dos Bahías, Elefantes Marino y toda la diversidad faunística de Península Valdés, mencionando parte de las valiosas asistencia, que no comprometieron un presupuesto que en esos años tuvo el aporte de la Dirección Nacional de Turismo para la infraestructura, que es el 70% de lo que existe en los eslabones de la península y el Sistema.(Casas de Guardafaunas, laboratorios y complementos hasta de Servicios Turísticos, en: Punta Loma, Isla de los Pájaros, Istmo Ameghino, Punta Pirámide, Punta Norte, Punta Bajos, Caleta Valdés y Punta Delgada) fueron aportes Nacionales.
En Chubut, todos los atractivos de naturaleza activa, antes de habilitarse han tenido su estudio científico y de manejo previos, con la Fundación Zoológica de Nueva York, conseguimos a partir de 1970 el estudio más completo de preservación y manejo en Avistajes Turísticos, que se ha hecho en el planeta de las “Ballenas Francas del Sur”. Y simultáneamente el estudio de “los Pingüinos de Magallanes en Punta Tombo. Sobre dicha área, con la gestión de la Asociación Geográfica de la Patagonia (Presidida por el Dr. José Felix Alberdi) logramos un subsidio, no reintegrable de 200.000 dólares que nos aportaron las Fundaciones del Zoo. De Frankfurt y Nueva York, para construir dos unidades de vivienda para Guardafauna y Cientificos y otras instalaciones de servicio.
De 1976 al 2006, Chubut recibió en donación de “Turismo Nacional” la flota completa de vehículos Borward para todas las Unidades de Conservación (8 en esos tiempos), la financiación del Centro de Interpretación del Istmo, completándose con créditos y presupuesto provincial la cinta asfáltica de Madryn, a Pirámides. En 1980 integrando la Presidencia de la Junta Asesora de las Áreas Protegidas de Chubut, invitado por el Gobernador de Chubut, Capitán Martin, me tocó participar en la reunión de Rawson, con el Presidente de la Fundación de Vida Silvestre Argentina, Dn. Miguel Reynal, que por promesas de nuestro Gobierno Provincial iban a asumir la Administración del Área Protegida de Punta Tombo. Me tocó disuadir al Gobernador y a los directivos de la Fundación de que esto era imposible por los principios de “identidad” que se habían sembrado desde 1966 a los Ciudadanos de la Comarca, sobre este creciente compromiso, que convertiría en frustración, el mencionado paso. Además como fundador en 1972 de dicha Área Protegida, dejaba constancia de la negativa.
En el 1994, siendo Ministro de Turismo de la Provincia de Rio Negro y Presidente del Consejo Federal de Turismo participé en la Reunión de la UNESCO en Paris, donde nos condicionaron a que para que Chubut, fuera “Patrimonio de la Humanidad en Península Valdés, deberían tomar estatus de “Parques Nacional”, desde ese momento instalamos nuestra pretensión del “País Federal”, que debe sumar jurisdicciones , no calificaciones de Ciudadanos de Primera por lo que se decide en la Capital Federal, y de Segunda, por los provincianos, a los que se obliga a –pedir permiso-, también para cuidar…
1987, nos indicaron en la UNESCO, que si se aprobaba el Plan de manejo de la Península Valdés nos darían como excepción el calificador: Patrimonio de la Humanidad. Rendimos examen ante la Asamblea en Paris, el 6/7/1999 y en la Asamblea plenaria de la UNESCO en Marrakesk, nos aportaron por “unanimidad” el soñado calificador. A lo que se sumó en 1012, el Sitio Mundial Ramsar y en 1914, “El Sitio Mundial de la Biosfera”, hemos sumado así los chubutenses la “máxima calificacion de las Américas, para un Sistema Natural-Turístico, construido por los de acá, que hoy cumple “medio siglo”
Nosotros, gente del sur, heredamos la rica arborescencia de raíces provenientes de distintos tonos y modos humanos, una genealogía multifacética que es el molde existencial del patagónico luchador, “contra vientos, frío y mareas.

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