Imperdibles de Madryn

San Sastre, pero sin milagros “Marianos”

Ricardo Sastre parece un objeto de culto de mediación. Todos los días gremios distintos como ATE, ATECH, SITRAJUCH, UPCN, ETC, además de ruegos masivos por la perforada SEROS, le piden que interceda y medie en la crisis que está sufriendo la provincia. Esta semana, hasta los estudiantes de Madryn, le reclamaron por el TEG. No puede dar más respuesta que la de tratar “con sus buenos oficios”, que el gobernador Arcioni reciba, tanto a los empleados de su provincia como a los estudiantes. Casi se le pide el milagro de la “aparición con vida de Arcioni”. (Ya hay memes circulando en las RRSS)
Sastre debe entender que, así como “no hay peor gestión que la que no se hace”, podríamos decir que “no hay peor expectativa que la que no se cumple”. Todo lo que está sucediendo es posiblemente la mejor escuela con vistas al futuro. Por eso, mejor que los políticos “se pongan los pantalones largos”, porque los chubutenses no merecen “que les corten las piernas”.

Siempre a contrapié

“El que no sabe lo que busca, no reconoce lo que encuentra”. Esta parece ser la frase que mejor define a la UCR en la provincia de Chubut. La alianza Cambiemos le ha dado a la UCR el mejor vehículo para llegar al gobierno. Les abrieron las puertas de la “nueva política”, pero no han podido dejar atrás la controversia de la “vieja política”.
Mientras que Cambiemos posee una confirmación heterodoxa y abierta para incorporar en sus filas políticas a cualquier persona, las “mujeres del radicalismo” objetan esto, cuál si se trataran de una perfecta raza superior.
Este es el radicalismo de la provincia que se olvida de la caída infinita a la que llevaron los destinos chubutanos. La pregunta es si ahora en su pureza “corpopolitica” ¿está Maestro y Buzzi?
Mientras Cambiemos y su componente radical nacional recibe a diario críticas de Raúl Alfonsin (hijo), en perfecta y abierta disidencia con el gobierno, el radicalismo de Chubut lo recibe como orador sinergizante de la fuerza política. Alfonsín ha logrado confirmar el pacto del radicalismo en Chubut. En su juntada de otoño no faltó nadie. Las dos principales personalidades chubutenses en primera fila. Lo que se ve es que Cimadevilla y Menna están cada vez más `radicalizados´, y cada vez menos de Cambiemos.

¿Minería “ni”?

Mientras el gobierno nacional apoya a la minería como vehículo económico de la hecatombe socio financiera de Chubut, el principal objetor está dentro de su mismo espacio y es Menna, como también el intendente de Esquel Ongarato.
Los radicales penetran espacios, pero no conviven en ninguno. El idealismo “Corpo político” de la vieja política hace que solo el poder quede como objetivo y no la industralización, el empleo y el bienestar.
Solo ideas radicalizadas pueden llevar a “decir pertenecer” y “convivir en otra pertenencia”. Chubut, ahora más que nunca, necesita tanto de una empinada económica e industrial de acuerdo a sus recursos, como de políticos que posean una coherencia intelectual y de compromiso con lo que pregonan. Sencillamente porque ya la sociedad no resiste la incoherencia post-Alem que les ha permitido a muchos ocupar el puesto de pocos. La coherencia necesaria del “after exilio” es para crear un futuro más allá de lo lindo del discurso.
Se calcula, según datos de las cámaras industriales, organismos internacionales y hasta del gobierno, que Chubut cubriría el déficit existente solo con la actividad minera. Ingresarían al estado provincial $11.350 millones anuales, se crearían 8.300 puestos de trabajo directo en 1 año, 6.000 puestos indirectos y 3.200 inducidos. Ósea, 17.000 puestos de trabajo, y se sanearía la provincia.)
Dice la voz de la calle que Chubut espera más de los radicales y no que estos brinden lo mismo que los peronistas. Las paradójicas rectas de la UCR en Chubut se entremezclan con “radichetas” para olvidar y correligionarios para desconocer. Parece que sería una falla de origen esto de que “una vez que encuentran la dirección a seguir, pierden la intensidad y el rumbo de la marcha”.

Crece la puja sindical

Cada vez con más participación avanza la conformación de la mesa sindical con anclaje en Puerto Madryn. Se trata de un grupo de dirigentes sindicales que ya no se sienten contenidos en la esfera oficial de la CGT del Valle y Puerto Madryn, tantas veces manoseada el año anterior. Ocurre que el enfrentamiento que protagonizaron el conductor del STIA, y los pesos pesado de Camioneros y Luz y Fuerza para quedarse con la “manija” de la CGT, sólo trajo aparejado un sinnúmero de conflictos internos, que no llevaron a buen puerto.
Ya no hay dudas que la unidad sindical es tan endeble como la del PJ, y como de una u otra forma están asociadas, ahora el dirigente de los gastronómicos, Patricio Rosales parece ver una posibilidad cierta de fortalecer su papel en el entramado de una mesa sindical que reúna los gremios que hasta aquí siempre han estado a la sombra de los que tienen el sello más grande, o cuentan con más afiliados.
Así las cosas, la mesa sindical del Golfo Nuevo va tomando forma, y en ese “armado”, también se analizan las alianzas estratégicas de cara a 2019, puesto que las diversas líneas internas del PJ, buscan aliados para fortalecer la tan mentada unidad.

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