Con el eje en la situación socio-laboral que atraviesan los países miembros, se realizó el encuentro de sindicatos de comercio afiliados a la UNICOM Américas del Mercosur, con la presencia de representantes de Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil y chile, quienes coincidieron en expresar su preocupación en torno al empleo.
Alfredo Beliz, secretario General del Sindicato de Comercio en Chubut, participó del encuentro donde se abordaron problemáticas socio-laborales en el marco del centenario de la Organización Internacional del Trabajo.
El congreso coincidió en la necesidad de fortalecer desde la sociedad civil y sus organizaciones la integración del Cono Sur de América Latina, promover en las zonas de frontera el trabajo decente y participar activamente en las instituciones socio-laborales.

Flexibilización y trabajo irregular

“Abordamos temas puntuales como la problemática de inmigrantes en todos los países miembros, el escenario real de las fronteras, la flexibilización laboral, el trabajo irregular y poder encontrar en conjunto un control, un marco regulatorio que construya una salida posible a la problemática actual y de este modo poder presentar un escrito al G20, que este año se llevara a cabo en provincia de Mendoza”, expresó Beliz.
Este año, el G20 se enfoca en temas como el futuro del trabajo, que implica pensar en una educación que brinde igualdad de oportunidades, infraestructura para el desarrollo y un futuro alimentario sostenible, en este contexto se presentara el documento elaborado por los miembros del UNI Américas del MERCOSUR.
En ese contexto, Beliz dijo que, “es preocupante la cantidad de inmigrantes que llegan a Argentina en busca de trabajo y esto desajusta todo el circuito laboral, porque existe más precarización y trabajo irregular las empresas toman empleo irregular, las Pymes no pueden pagar los impuestos y los empleados debidamente registrados pierden su fuente laboral, es una situación alarmante”, concluyó el dirigente sindical y parlamentario del Parlasur.

Trabajo inclusivo, equitativo y sostenible

Días pasados se realizó la reunión ministerial de Empleo del G20, que finalizó con una declaración consensuada que propone «un futuro del trabajo inclusivo, equitativo y sostenible». El documento presenta recomendaciones para abordar la brecha de género, las barreras que sufren las personas con discapacidad y la situación laboral de los jóvenes, entre otros temas.
Sobre el final de una semana dedicada al futuro del trabajo, una de las prioridades del G20 2018, los ministros insistieron en la formación de habilidades y en establecer «nuevos marcos institucionales innovadores».
A su vez, reconocieron los «cambios significativos» en el ámbito laboral, como la automatización y las transiciones demográficas. «Los desafíos de la actualidad nos exigen la elaboración de respuestas multidimensionales y posicionar a las personas, el trabajo y el sustento de vida en el centro de nuestras estrategias», destaca el documento, que celebra además la «fructífera cooperación» con los ministros de Educación del G20.
En ese sentido, el texto vuelve sobre las habilidades, un punto presente también en las declaraciones de la Reunión ministerial de Educación y la Reunión conjunta de ministros de Educación y Empleo. En concreto, habla de «liberar el potencial de las personas a través de una política para el desarrollo de habilidades innovadoras y coordinadas».
La declaración explica, en esta dirección es necesario «un enfoque de aprendizaje permanente e inclusivo» y destaca la necesidad de mejorar la situación laboral de los jóvenes. Además, se refiere a la participación de las mujeres en el ámbito laboral, un objetivo que incluye una meta concreta para el G20: reducir la brecha de género a un 25% para 2025.
Otro de los puntos destacados de la declaración alude a la promoción de la participación de las personas con discapacidad en el mercado laboral. Al respecto, el futuro del trabajo ofrece una oportunidad a partir de la tecnología, un aspecto abordado en concreto en un anexo específico respaldado por los ministros.
La declaración destaca, asimismo, el consenso alrededor de la formalización laboral, la protección social integral y la erradicación del trabajo infantil y la trata de personas. Los ministros también piden analizar los sistemas de protección social. «En el marco del futuro del trabajo, los sistemas de protección social enfrentan desafíos relacionados con la sostenibilidad, la universalidad de la cobertura de acuerdo con los parámetros nacionales y la suficiencia de los beneficios», explican.