MADRYN, DE `LA MAS LINDA´ AL ESTIGMA DE `NARCOLANDIA´. CUATRO VÍCTIMAS, DOS MUERTOS Y DOS DESAPARECIDOS OTRA VEZ PONEN EN ESCENA LAS SOSPECHA QUE EL NEGOCIO DE LA DROGA ESTÁ INTACTO EN CHUBUT. EL NARCOMENUDEO, UN NEGOCIO EN EXPANSIÓN, EMERGENTE DE LAS GRANDES TRANSACCIONES ABORTADAS Y/0 CONCRETADAS

¿Lanata tenía razón?

Por Juana de Arco*

Es durísima esta pregunta precisamente para quien trató de resistir que un `foráneo´ marketinero a sueldo que se tragó a aquel buen periodista conocido, y un día vino hasta Puerto Madryn a plantarnos el duro mote de “Narcolandia”. No era justo hace cinco años, como tampoco es justo ahora para el amplio porcentaje de vecinos de la ciudad que vivimos de nuestro laburo y a la par vemos la escandalosa avanzada del dinero `fácil´, por no decir lavadito y sin respaldo documental. No es justo, pero es real.
La avanzada del menudeo de drogas mal que le pese al juez federal que alguna vez quiso darnos cátedra al respecto sobre que va por vías diferentes al narcotráfico, muy por el contrario van juntas y ligadas. Son dos caras de una moneda maldita que solo compra muerte.
Que en pocos días tengamos dos jóvenes muertos y dos desaparecidos en los últimos meses, no es precisamente una situación que pueda mantenernos lejos de los adjetivos. Ayer, luego del hallazgo del cadáver presuntamente de “Pato” López, la fiscal Silvana Salazar confirmó en una conferencia de prensa que el caso «está vinculado a drogas». Asimismo, adelantó que la autopsia del cuerpo se realizará hoy, luego de lo cual se podrá determinar las condiciones y la mecánica de la muerte. Hace unos días el presunto “suicidio” doble (ahorcamiento y corte de muñecas) que se leyó en el cuerpo de Nicolás Cerrudo, un chico de apenas 20 años exestudiante de una escuela del barrio Sur y amigo de López, y que había declarado como testigo en la causa por su búsqueda, completó un escenario demoledor. Además hay un desaparecido de hace unos meses como Gastón León, que pesa en el sentir comunitario tanto como el otro desaparecido de esta semana: Federico Lomeña.
La fiscal no es experta en casos complejos pero tiene el suficiente sentido común y la información para interpretar los hechos, y no anduvo con eufemismos, como el Jefe de los Fiscales, que además se tomo licencia en el marco de un hecho de tremenda envergadura. ¿Feria anticipada, cuestiones personales, esquive de posibles esquirlas que pudieran afectar su ilusión de llegar intacto al Superior Tribunal de Justicia? Quien lo sabe.
El desparramo en la ciudad se hizo sentir. No alcanza con el esfuerzo de los laburantes para que la “más linda” sea también “la más segura”. Hace falta un fuerte compromiso de quienes ostentan el poder real. Que son en términos de justicia, y para decirlo en criollo, los que pueden acusar pero no acusan.

El mensaje demoledor

Ayer el Intendente de Puerto Madryn, Ricardo Sastre salió a despegarse de los cadáveres que le estaría tirando el destino en “la más linda”. “Nosotros como Estado, hacemos todo lo que está a nuestro alcance (sic). Los que conocen la gestión, saben que para esta ha sido una bandera desde que asumimos. Hay decenas de deportes y actividades que comenzaron a llevarse a cabo con el fin de sacar a los chicos de los malos hábitos, y quitarle clientelismo a este flagelo”, dijo el alcalde.
Pero además reconoció que “más allá de que las políticas implementadas por la gestión hayan sido premiadas incluso a nivel nacional, o hayamos disertado en eventos de magnitud sobre el tema en varios puntos del país, como Municipio siempre hemos puesto a disposición de la Justicia y las Fuerzas de Seguridad todo lo que podemos brindar como Estado, con absoluta predisposición, porque entendemos que el trabajo entre todos, es más beneficioso para obtener resultados”.
En ese sentido, Sastre espera que “así como la lucha contra el flagelo de las drogas fue una bandera para esta gestión, pretendemos que también lo sea para quienes deben actuar (sic)”, indicando que “tanto las Fuerzas de Seguridad como así también la Justicia contarán siempre con el apoyo y la colaboración de la Municipalidad con las herramientas que dispongamos. Tenemos que hacer que esa lucha se convierta en bandera de todos, quitar clientelismo, y acabar con los personajes que contaminan la sociedad”.
Para el Intendente, cada investigación que se inicie “debe ir a fondo, y caerle con todo el peso de la Ley a los responsables. No estamos hablando de cuestiones menores. Algunas cuestiones exceden al Municipio, porque escapan a nuestras posibilidades, sobre todo lo que tiene que ver con medidas policiales o judiciales. Pero desde el lugar que esté cada uno de los actores, debe brindar todo lo que tenga. No existe otra manera”.
Hasta ahí la versión oficial que era absolutamente necesaria, pero lo que no acompaña a las palabras suelen ser los hechos. Que en Puerto Madryn haya un condenado por almacenador de mil kilos de drogas (o eran 100?) y siga cantando en el hotel más importante del pueblo entre timba y drinks los `enganchados del Potro´, demuestra que casi nada ha cambiado. Que en marzo de este año se haya legitimado una especie de pacto sectorial y político que implicara dejar de revisar las responsabilidades pasadas en las avanzadas turbias de Madryn, fue un cachetazo demasiado fuerte para quienes creíamos que había esperanzas de plantarse a un mecanismo de enriquecimiento y poder que no puede destilar sino sangre. (Ver http://www.eldiariodemadryn.com/2018/02/cogobierno-en-narcolandia/ )
El sello que parecen haber dejado los mafiosos en los dos casos de los jóvenes muertos muestran una cruel coincidencia: el corte de sus manos. ¿Un mensaje sobre lo que tocaron que no debían?
El lacrado político en cambio habla de otro corte, el del paso político, el de la ruta equivocada. ¿O faltan ejemplos en la política argentina para interpretar que significa los muertos en el camino?
En el medio, familias destruidas, amigos temerosos, vecinos consternados en un proceso que no empezó hoy, con estos dolores sociales, ni con la pérdida de estos chicos.
Desde los crímenes nunca del todo esclarecidos como el de Vanesa Retamal (22/12/1998) o Diana Rojas (17/05/2016), sin olvidar el de la pequeña Leonela Aguirre (10/03/2010) hasta llegar a casos resonados como el de “Cacho” Espinosa, en 20 años las víctimas de la trama blanca que ha rodeado algunas muertes, no han cesado de regar el Golfo Nuevo. Lo hemos dicho una y otra vez, y lo seguiremos diciendo a la triste sombra de los archivos documentales ( Ver http://www.eldiariodemadryn.com/2015/01/un-muertito-mas-menos/ )

¿Cómo se para esta pelota?

Es verdad que el de Madryn no es un caso aislado, pero es el que nos ocupa como ciudadanos si es que se busca parar esta especie de rueda karmática que parece rodar por los estamentos de poder. La venta minorista de drogas aumentó en todo el país. Lo ha dicho el Barómetro del Narcotráfico y las Adicciones del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), exponiendo que ya en 2016, el 48,5 % de los hogares del país percibían de manera directa o indirecta que en su barrio se vendían drogas ilegales. Tan solo seis años atrás, esa proporción era significativamente inferior, un 30 %. Lógicamente, las estadísticas sobre el consumo también revelan aumentos en la demanda, que entre 2010 y 2017, se triplicó, de acuerdo con el Estudio 2017 de Consumo de Sustancias Psicoactivas de Sedronar. El mercado no sólo envuelve como las estadísticas muestran a jóvenes y adolescentes, sino que el negocio se cimenta también en el consumo de sectores de poder. Cuanto más amplia la rueda de la participación y la complicidad, para el narcotráfico, mucho mejor.

Entender la amenaza

La socióloga y especialista en narcotráfico y organizaciones criminales Laura Etcharren es una de las investigadoras que ha venido advirtiendo del avance del narcomenudeo en la última década. «Sin narcotráfico no hay menudeo y sin menudeo, no hay narcotráfico», aseveró. Para la experta “la relación es dialéctica. De un ida y vuelta, porque el narcomenudeo es la base primaria del narcotráfico. El narcotráfico necesita del narcomenudeo porque este último lleva adelante un testeo en los barrios acerca de cómo se encuentra el tejido social, la permeabilidad que hay en el barrio, si existe o no disputa territorial. El narcomenudeo es también el termómetro del consumo. Es decir, cómo cambia la demanda de estupefacientes, las nuevas inclinaciones, la decantación del consumo de alguna droga en particular. El narcomenudeo es el micromercado y la caja chica que tiene distintas fases dentro de la cadena y, dependiendo del barrio y de los alcances de las bandas, tendrá mayor o menor articulación e infraestructura. Estas incluyen el dealer, pasando por el punto de venta de droga, el expendio armado, el búnker. La fortaleza de cada estructura es distinta, al igual que las dinámicas. De ahí que sin narcotráfico no haya narcomenudeo, y sin narcomenudeo no haya narcotráfico”.
El avance de todo esto es posible no sólo y principalmente por la complicidad que pudiera existir en algunos sectores, sino también por “La omisión, la negación y la subestimación que son acciones pasivas que terminan siendo conniventes”. “Hoy Argentina es un 55 % de tránsito mientras que todo el resto queda aquí y/o se elabora aquí. Me refiero no solo a drogas sino a todas las vertientes del crimen organizado. Cada punto de venta, o cualquiera sea la fase de la cadena de venta de estupefacientes, es un foco de muerte porque la droga es un proyecto de muerte”.
Para la socióloga encarar soluciones implica “En primera instancia, hay que reconocer el problema de la instalación del narcotráfico. Si bien no hay duda de que la lucha ya se empezó, porque aumentaron los procedimientos, así como también las incautaciones, porque es cierto que han aumentado los decomisos de drogas, también aumentó el consumo. De acuerdo con las fuentes de investigación, solo se incauta entre el 5 % y el 10 %, eso significa que lo que no se contiene de la mercadería letal, definitivamente se propaga y se consume. Debemos tener en claro que la droga como enfermedad es la base de la droga como delito y que la columna vertebral de todas las vertientes del crimen organizado es el lavado de dinero. Hay que tener en cuenta que el narcotráfico crece a partir de lo legal, no de lo ilegal”.
Este dato, tal vez sea el más importante en torno a los hechos que nos vuelven a merecer el triste apodo de “Narcolandia”. Para abordar el “lavado de dinero” hace falta encarar el enriquecimiento ilícito, el crecimiento exponencial y los pozos de inversiones sin rostro. En Madryn, estos otros `flagelos´ son parte del paisaje cotidiano que se expande proporcionalmente a nuestra apatía. Sobre ello han corrido y correrán ríos de tinta, que son preferible siempre a los dolorosos ríos de sangre de nuestra gente.

*Soy Juana de Arco,…y ceniza de tantos

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