Por Trivia Demir

La semana comienza con un giro en el desparramo peronista provincial que terminaría con la sumatoria de los ´compañeros´ provinciales en el frente “Chubut Federal” que lidera la fórmula Mariano Arcioni-Ricardo Sastre. Aunque en principio había fuerte resistencia del PJ ortodoxo, el paso al costado que terminó dando el candidato mejor posicionado, el comodorense Carlos Linares, terminó precipitando una seguidilla de escenarios posibles donde una alianza mayoritaria, no se descartaría. Y si para los peronistas valletanos la solo posibilidad de terminar absorbidos por el partido provincial conformado por Das Neves, Chubut Somos Todos, revuelve algunas tripas, ni hablar para los referentes de ese sector que terminaría aliado a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. “Si Mario se asoma de su eterno descanso, no lo podría creer”, reflexionó un ex funcionario conocedor de los límites que propugnaba el líder fallecido. Sin embargo, para otros la realidad que el liberalismo siga avanzando con una reelección en puerta requeriría de todos los esfuerzos posibles para limitarle el paso en la mayor cantidad de distritos federales que se pueda. De hecho, este fin de semana, Cristina decidió ablandar su posición respecto a algunos gobernadores de base peronista y lanzó gestos de conciliación y una orden directa: buscar la unidad a toda costa.
Según el matutino porteño La Nación, “la instrucción de Cristina ya se tradujo en acuerdos para las elecciones provinciales de cuatro distritos: La Pampa, San Juan, Neuquén y Río Negro. A esas provincias podrían sumarse Tierra del Fuego y Chubut, donde avanzan negociaciones para que el PJ y Unidad Ciudadana (UC) compitan en uno mismo frente electoral. «Cristina bajó una línea muy clara y está muy encima de esas gestiones», dicen que afirmaron desde el Instituto Patria.
En Chubut los mensajeros serían la senadora Nancy González y el diputado nacional Santiago Igón de La Cámpora. Y si bien aún no ha habido confirmación desde Chubut Federal, todo indicaría que aceptarían algunos acuerdos, aunque con fuertes limitantes a las aspiraciones de varios de los pesos pesados que fungen en el llano y pretenden volver al ruedo de gestión. Arcioni sabe que en una construcción donde ´todo vale´, su propia imagen podría quedar afectada sobre el pasado ajeno y los traspiés de períodos anteriores que aún tiene fresco en la memoria la vecindad. No hay que olvidar que desde la cruzada separatista de Das Neves, el PJ anda boyando por los laterales del poder de Fontana 50, y cuando ingresó por la ventada de la gestión de Martín Buzzi le empiojó sobremanera su propia conducción, al punto de perder la reelección definitivamente. De hecho de darse tal alianza, Chubut Federal quedaría enlazado a Cristina y a Massa, un enredo difícil de explicar. Todo esto podría terminar en definitiva empujando a un cambio con Cambiemos que en Chubut busca hacer su propia experiencia.

Lo que no cambia es la “bicicleta”

Y si algo no ayuda a la campaña de Mauricio Macri son las realidades que exponen que el cambio en muchas situaciones, aún no se ha dado. Por ejemplo la permanente bicicleta que en su momento se le cuestionaba al kirchnerismo. Más allá del discurso diferente que se intenta, en los hechos se repite la historia y Cambiemos sigue financiando el gasto público con fondos de la Anses. Esta semana el Gobierno volvió a emitir letras del Tesoro por 10 mil millones de pesos a 180 días que serán suscriptas en forma directa por Anses. La emisión se realiza «en el marco de la programación financiera para el presente ejercicio», según informaron desde el Ejecutivo cuando Mauricio Macri firmó la resolución junto al Ministerio de Hacienda y Finanzas de Nicolás Dujovne. La forma de colocación será por suscripción directa, y devengará intereses a «Tasa Variable», pagaderos trimestralmente el 29 de abril y el 29 de julio de 2019. Según se explicitó en la resolución conjunta 6/2019, la moneda de emisión y pago son los pesos y la moneda de suscripción, pesos o dólares estadounidenses al tipo de cambio de referencia de la Comunicación «A» 3500 del Banco Central correspondiente al día hábil anterior a la fecha de liquidación. Además, la amortización será íntegra al vencimiento y la Letra del Tesoro será intransferible y no tendrá cotización en los mercados de valores locales e internacionales. Este título gozará de todas las exenciones impositivas dispuestas por las leyes y reglamentaciones vigentes en la materia. O sea…

Las elecciones son “riesgosas”

Desde el Fondo Monetario Internacional trascendió que están «preocupados» por la posibilidad de que los argentinos elijan a la oposición al macrismo en las elecciones democráticas de este año. De hecho, se sabe que el FMI otra vez tiene una fuerte injerencia en la política argentina, y no solo por la multimillonaria deuda que la gestión de Mauricio Macri tomó con el organismo. Ahora, aseguraron que las elecciones democráticas en nuestro país son «un riesgo considerable». Fueron declaraciones del jefe del departamento del FMI para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, quien afirmó que «Claramente un cambio en la agenda económica podría tener un impacto importante en los movimientos favorables que hemos visto en los mercados financieros y en la economía argentina que esperamos se den en 2019″. En conferencia de prensa, insistió en su apoyo a Cambiemos y en su intento de convencer a los argentinos de que no voten a la oposición en las elecciones presidenciales de este 2019 y directamente lo ató al devenir nacional casi como advertencia. «Para la recuperación de la inversión en la Argentina va a ser muy importante saber cuál va a ser el marco de políticas no sólo de 2019 sino de los próximos cuatro años», sentenció.

El mercado, el elector por excelencia

La fuerte baja del riesgo país a 666 puntos aceleró las especulaciones sobre un regreso de la Argentina a los mercados voluntarios de deuda. Un paso necesario para que el Gobierno salga de la dependencia del FMI como prestamista de última instancia y pueda administrar mejor los fuertes vencimientos que tiene por delante. De hecho, entre 2020 y 2023 Argentina tiene que afrontar pagos de deuda por cerca de 135.000 millones de dólares. Y los 10.000 millones de dólares que el Gobierno puede llegar a transferir desde el programa financiero de 2019 a 2020, pueden ser la señal para que el Tesoro encuentre una fuente alternativa de financiamiento al FMI. Por eso, el economista José Siaba Serrate venía advirtiendo a Cambiemos desde fin de año avanzar poco a poco en la reapertura del mercado de deuda para desactivar las expectativas de default y así reducir las chances de que el riesgo político se extreme en un año electoral. En el terreno de las profecías autocumplidas, alejar el fantasma de default es sinónimo no solo de rollover de vencimientos, sino de estabilidad cambiaria. En este sentido, un informe de la consultora Inveq publicado el viernes estima que la cotización del dólar no solo dependerá de la política del Banco Central sino de la demanda de instrumentos de deuda en pesos. Como dato del esfuerzo que se está haciendo vale apuntar que la semana pasada semana Hacienda logró rollovear el 100% de los vencimientos de Letes en dólares y hoy lunes reabrirá la colocación de Lecaps en pesos con vencimiento al 30 de abril y 4% de pasa nominal mensual, y saldrá con el primer valor a 2020, una Lecap a 547 días al 2,65% nominal mensual.

¿Alguien quiere ser candidato?

´Si Vidal adelanta y le va bien, Cristina podría desistir de ir a las presidenciales y eso no le conviene en absoluto a Macri´, así de intrincada están las cosas y la política doméstica. Además del maremoto de dudas de los principales protagonistas sobre si conviene ganar o no el poder tal las condiciones de gobernabilidad que se darán con las arcas perforadas. De hecho fuentes calificadas de Cambiemos afirman que en alguna medida se ´subestimó´ el escenario en el que asumía Macri y la complejidad que se avecina para enderezar la nave. Por su parte Cristina hizo un mini-lanzamiento de sus aspiraciones políticas, un despliegue tan tímido como las aspiraciones reales de agarrar de nuevo la batuta.
La realidad es la que marca la cancha. Según el informe fresquito del Observatorio de Deuda Externa, en 2019 la Argentina recibirá del FMI 22.555 millones de dólares y deberá pagar vencimientos por 37.927 millones de dólares. Las cifras son muy desparejas. Pero no tienen ni punto de comparación con los números del futuro. En 2020 el país recibirá desembolsos por 3.875 millones de dólares, pero deberá afrontar vencimientos por 25.719 millones de dólares. Mientras que en 2021 le entrarán 1.937 millones de dólares por desembolsos y deberá pagar 35.179 millones. Peor pinta todo para 2022 y 2023. Para esos años el programa firmado con el FMI ya no contempla desembolso alguno, pero esos años tocarán los mayores vencimientos por el préstamo stand-by contraído con el Fondo, entre otros pasivos. ¿Qué planes tendrá Macri si es que los tiene? ¿Y qué planes tendrá Cristina si es que los tiene para enfrentar tal desbarajuste? Estos son los interrogantes que gran parte del electorado ya se va haciendo en tren de no subirse a una calesita que definitivamente va a volcar, no? En ese marco, quien asuma la Gobernación también deberá saber que baile con quien baile, el candombe de los próximos cuatro años de gobierno en cualquier porción del territorio nacional, será interminable. Habrá que ver…

Fuentes: LN, NA, LPO, Página/12, ODE, propias