Impulsado principalmente por las subas en los rubros transporte y alimentos, el Indice de Precios al Consumidor (IPC-Costo de Vida) aumentó 2,6% en diciembre y acumuló una suba del 47,6% durante 2018, según reveló el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Las mayores alzas del año pasado se anotaron en transporte, con el 66,8%; alimentos y bebidas no alcohólicas con 51,2%; equipamiento y mantenimiento para el hogar con el 50%; vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles con el 45,7%, entre otros rubros. El acumulado de 47,6% resultó uno de los más altos de los últimos años, superando al 38,5% del 2014, cuando se produjo una devaluación del 30%; al 40,9 % del 2002 cuando se produjo la salida de la convertibilidad, y solo por debajo del 84% de 1991, en el gobierno de Carlos Menem. Luego de que se conociera la suba del 2,6% de diciembre, voceros del Banco Central consideraron que “es normal esperar que la inflación mensual se mantenga en estos niveles durante los próximos meses “Si bien la inflación de diciembre (2,6%) sigue siendo alta, descendió por tercer mes consecutivo desde el pico de septiembre de 6,5%”, destacaron fuentes de la entidad que dirige Guido Sandleris.
Además, apuntaron que la inflación anual de 47,6% “refleja la inestabilidad cambiaria que vivió nuestro país”, en la que el dólar duplicó su valor. Durante el año pasado los bienes subieron 50,5% mientras que los servicios avanzaron 42,8%. Medidos de otra manera, los bienes y productos estacionales subieron 35,2%, los regulados aumentaron 53,5%, mientras que el IPC Núcleo avanzó 47,7%. Con una inflación minorista a nivel nacional del 47,6%, la Patagonia resultó la región más afectada con el 50,6%, seguida por Cuyo con el 49,5%; mientras que la suba de precios del área Gran Buenos Aires se colocó por debajo, con el 47,1%.