En el marco de una situación económica que todavía no ha dado respiro en lo que va del 2019, algunos sectores productivos y comerciales de Puerto Madryn continúan resintiendo sus operaciones.
Tal es así que, el pasado miércoles, la empresa Red Chamber anunció el despido de 15 de sus empleados, aunque la medida fue frenada por la delegación de la Secretaría de Trabajo provincial en Puerto Madryn, que convocó a las partes –la firma, el gremio y los trabajadores que podrían ser cesanteados– y dictó la conciliación obligatoria, con lo cual se retrotrajeron las desvinculaciones.
Al mismo tiempo, la industria de la carne continúa sufriendo la baja en el consumo, y una reconocida cadena local de carnicerías se apostaría a despedir a unos 15 empleados en sus distintas sedes, entre esta semana y la próxima.
De este modo, el sector privado continúa registrando despidos por “goteo”, modalidad que se ha incrementado en los últimos tres años y que responde a la pérdida de competitividad de algunos segmentos productivos, así como también a la caída en el consumo de bienes y servicios por parte de un importante sector de la población.

“Freno de mano” y negociaciones

En el caso de Red Chamber, los despidos de unos 15 empleados generaron una automática reacción por parte de la oficina de Trabajo en la ciudad del Golfo, desde la cual se retrotrajo la decisión empresarial tras el dictado de la conciliación obligatoria, mientras que sobre las diez de la mañana del jueves, el sindicato, los trabajadores afectados y la empresa se reunieron en las instalaciones del organismo público, sobre la calle Roque Sáenz Peña, para arribar a una negociación.
Finalmente, transcurrido el encuentro en Trabajo, los despidos fueron “dejados sin efecto” tras la firma del Acta correspondiente entre la empresa, la Secretaría y los trabajadores.
Se trata de uno de los rubros más prolíferos en Madryn, el de la pesca, que registra récords de exportaciones año a año: “La actividad en el sector es una de las pocas donde, tras las medidas del Gobierno de la quita de retenciones y la devaluación de la moneda, las empresas exportadoras fueron beneficiadas, por lo que hoy lo que hay que hacer es prestar atención al cuidado del recurso, que sustenta el rubro. El sector está bien, y hay que destacar que, si bien ahora se realiza la pesca en aguas provinciales, en el invierno se abrirá la misma en aguas nacionales, y eso generará continuidad en el trabajo de las plantas de procesamiento”, consignó un referente del sector en diálogo con El Diario.

Carne trémula

En otro orden, la industria de la carne registró, en los últimos años, varias empresas frigoríficas que solicitaron el Programa de Recuperación Productiva (Repro), el cual apuntaba a dosificar el impacto de la crisis en sectores que atraviesan situaciones económicas adversas, principalmente en el rubro de las pymes.
El incremento en el precio de los cortes y la caída en el consumo también habría obligado a una reconocida cadena de carnicerías de Puerto Madryn, que cuenta con al menos cinco sedes en distintos puntos de la ciudad, a plantear el despido de 15 de sus empleados, escenario que hoy se encuentra en debate de cara a sostener las fuentes de trabajo.

Cierre de comercios

La situación comercial, en términos generales, también continúa resentida, y mes a mes son varios los locales que cierran sus puertas y “bajan la persiana”, debido a los altos costos que deben afrontar para el pago de servicios y las cargas sociales, en el caso de aquellos que cuentan con empleados a cargo.
Principalmente en la zona céntrica, y en un marco en el que los locales comerciales se encuentran, desde hace años, concentrados en pocas manos, los valores de los alquileres continúan siendo excesivos para muchos emprendedores que no logran generar rentabilidad en sus negocios, principalmente en aquellos ligados al consumo masivo, la tecnología y el rubro textil.
“Liquidación por cierre” es la leyenda que más seguido puede observarse en las fachadas de varios comercios, algunos de los cuales se trasladan por fuera del casco céntrico de Madryn, donde el costo de alquilar es más barato, mientras que otros como los que venden indumentaria deciden volcarse a la venta a través de las redes sociales, otra problemática que genera “chispazos” por la falta de regulación de dicho circuito, frente a los altos impuestos que abonan los comerciantes que disponen de locales físicos.