El desesperado pedido de la hermana de una joven de 14 años mantuvo en vilo a la comunidad de Puerto Madryn, el pasado sábado por la mañana, luego de que ésta advirtiera, a través de las redes sociales, que la menor había concurrido a una fiesta en la afueras de la zona céntrica, y que luego fuera golpeada y “subida a un auto” por tres hombres, que aparentemente la habían raptado.
La denuncia fue radicada en una comisaría local, a partir de lo cual se dio inicio al protocolo policial para la búsqueda de personas, atentos al preocupante relato de una amiga de la adolescente desaparecida, quien había señalado que unos sujetos a bordo de un Volkswagen Gol gris las habían golpeado y se habían llevado a “L. C.”, de 14 años.
Aparentemente, ambas habían asistido a un cumpleaños en el barrio Solanas de la Patagonia, y al regreso habían sido interceptadas por un vehículo, del cual descendieron varios individuos, las golpearon y raptaron a una de ellas; según fuentes extraoficiales, lo que ocurrió fue que la menor aparentemente secuestrada se había quedado en la casa de un joven, aunque todavía no trascendió lo realmente ocurrido con la amiga, que expuso dicha versión y quien aparentemente había sido agredida.

“Les pegaron a ambas”

Las publicaciones no tardaron en viralizarse a través de las redes sociales, los grupos de vecinos e incluso los teléfonos celulares.
“’Y.’ salió anoche de mi casa a las 22:30 para irse a una joda (sic) en barrio Solana, ella estaba vestida como está en esta foto”, indicaba de manera desesperada la hermana de la menor, agregando que “volviendo a su casa, su amiga ‘Y.’ dice que paró un auto Gol gris, bajaron, les pegaron a ambas y mi hermana no pudo salir corriendo. La cargaron al auto y se la llevaron, por favor ayúdenme a buscarla, estoy desesperada”.
El pedido de ayuda comenzó a replicarse en distintas plataformas, y mientras pasaban las horas, la ansiedad parecía incrementarse; sin embargo, sobre el mediodía del mismo sábado, desde el Ministerio Público Fiscal, que estaba abocado a la búsqueda, confirmaron que la menor “apareció y se encuentra sana y salva”, lo cual encendió las dudas sobre la versión descripta por su amiga.

“Nos dijo que fue secuestrada”

La propia hermana de la joven que había permanecido desaparecida durante varias horas agradeció la solidaridad a quienes colaboraron con la búsqueda de datos para dar con el paradero de “Y.” y expresó: “Sepan entender la desesperación que me agarró cuando vino la ‘amiga’ de mi hermanita, ‘Y.’, llorando toda golpeada y nos contó esto de que mi hermana fue secuestrada”.
A ello, sumó que “La historia que nos dijo fue así, ella contó esto, pero cuando ambas ingresaron al cumpleaños en (el barrio) Solana, se separaron y no sabía nada de mi hermana. No sé que habrá pasado con su amiga (la que relató la versión del secuestro) porque todavía no pudimos verla, mi hermana está bien, estaba en la casa de los pibes que la pasaron a buscar por mi casa cuando salieron las dos juntas”.

Estaba con el novio

También, reconoció que “esto no es joda, Madryn ya no es el mismo desde hace unos varios años atrás, ahora no podés salir sin miedo de tu casa y por eso me puse en esta situación y la busqué por todos lados, sepan ponerse en el lugar del otro también”.
La primera versión había generado, incluso, posicionamientos racistas y xenófobos, donde algunos vecinos responsabilizaban a integrantes de una de las comunidades extranjeras asentadas en Puerto Madryn como responsables de raptar a la adolescente de 14 años.
A pesar de la importante movilización de recursos para dar con el paradero de la menor, finalmente trascendió que la misma se encontraba junto a otro joven “de 18 años recién cumplidos”, quien aparentemente sería su pareja y a quien la familia habría decidido no denunciar, ya que todo se habría tratado de una confusión, a lo cual se le sumó la falta de comunicación y la posterior -e inevitable- preocupación de sus allegados ante la versión del secuestro, finalmente desestimada por la Justicia local.