El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, dijo a un tribunal británico que su trabajo había ayudado a proteger a “muchas personas” y se rehusó a un procedimiento de extradición a Estados Unidos, donde enfrentaría cargos por su rol en una de las mayores filtraciones de datos clasificados de la historia.
Estados Unidos solicitó la extradición de Assange, quien fue sacado a rastras de la embajada ecuatoriana en Londres el 11 de abril y acusado de conspiración para acceder a computadoras, un cargo que conlleva a una pena máxima de cinco años.
Consultado en la corte de Westminster si está de acuerdo con ser extraditado a Estados Unidos, Assange, dijo: “No quiero rendirme a la extradición. Soy un periodista que ganó muchos, premios, y que protegió a muchas personas”.
El miércoles, Assange fue sentenciado a 50 semanas de prisión por una corte británica por violar las condiciones de su fianza cuando se refugió en la embajada hace casi siete años.