Mediante un proyecto de ordenanza, la presidenta de la bancada Convergencia Rawson, Gisel Genoff ingresó la propuesta de adhesión a la ley provincial VII – N° 129, la cual a su vez se suma a la ley nacional Nº 27499 llamada “Ley Micaela”, que establece la capacitación obligatoria y continúa en perspectiva de género y en violencia contra las mujeres para todas las personas que se desempeñen en la función pública en todos los niveles y jerarquías en los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Nación Argentina.
La iniciativa de Convergencia Rawson, también lleva la firman del edil Marcos Taruman.

Fundamentos

El proyecto de adhesión, señala que “la ley lleva el nombre de Micaela García, de 21 años, víctima de un brutal femicidio en Gualeguay, Entre Ríos, en 2017, debido a la conmoción publica que provoco el caso, ya que su femicida debió haber estado preso por otras violaciones cuando ataco a Micaela. Sin embargo, el juez de Ejecución de Entre Ríos, le había otorgado el beneficio de la libertad condicional al momento del crimen”.
La ordenanza impulsada por Convergencia Rawson se desarrolla en dos artículos, el primero que establece la adhesión propiamente dicha: “adhiérase la Municipalidad de Rawson a la Ley Provincial VIII – Nº 129, de capacitación obligatoria en genero para todas las personas que integran los tres poderes del Estado Municipal, que como Anexo I forma parte de la presente”.
Y en el segundo artículo se invita al, “Poder Ejecutivo Municipal a realizar las modificaciones internas que fueran necesarias para adecuarse a la mencionada Ley”.

Objetivos

En otro párrafo de la fundamentación se explicita que, “la mencionada Ley tiene por objeto capacitar y sensibilizar a quienes integran los diferentes estamentos del Estado entendido a los fines de dar efectivo cumplimiento a los deberes que asumió nuestro país al firmar la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer”.
Añade que, “la perspectiva de género busca examinar el impacto del género en las oportunidades de las personas, sus roles sociales y las interacciones que llevan a cabo con otros. Pretende desnaturalizar, desde el punto de vista teórico y desde las intervenciones sociales, el carácter jerárquico atribuido a la relación entre los géneros y mostrar que los modelos de varón y de mujer, así como la idea de heterosexualidad obligatoria son construcciones sociales que establecen formas de interrelación y especifican lo que cada persona debe y puede hacer de acuerdo al lugar que la sociedad atribuye a su género”.
Al momento de pasar al cuadro resolutivo, sostiene que es, “sumamente importante apoyar y adherir a este tipo de legislación, tan necesaria en estos tiempos en donde la perspectiva de género es una herramienta fundamental para lograr la igualdad entre las personas”.