QUÉ SUCEDE CUANDO LAS DENUNCIAS SUPERAN A LAS PROPUESTAS

La política, a cualquier precio

Por Lazarillo de Tormes

Durante los últimos días, una buena cantidad de denuncias y “chicanas” atravesaron el ámbito político local, donde algunos espacios endilgaron la responsabilidad de una serie de hechos a otros; y, como suelen decir por ahí, “se calentó la campaña”.
Faltan poco más de dos semanas para que la comunidad de Puerto Madryn elija quién será su nuevo Intendente, y quiénes representarán al vecino como concejales; las cifras que arrojaron las PASO fueron contundentes en algunos aspectos, y todo parecería indicar que no se esperan sorpresas de cara al 9 de junio.
No obstante, vale la pena repasar algunos de los acontecimientos más llamativos de la trastienda de la política (y de los políticos), durante una campaña que se caracterizó en principio por la buena convivencia entre los candidatos, y que de cuando en cuando “mostró sus dientes”.
¿Se puede hacer política a cualquier precio? La respuesta podría ser que “posiblemente, sí”. No obstante, los resultados pueden variar, según falten propuestas y sobren denuncias.

Las internas, externalizadas

La primera parada de la contienda electoral tuvo que ver con las diferencias internas entre algunos partidos, principalmente el justicialismo, que arribó a las Primarias con cuatro candidatos mejor o peor “rankeados” dentro de la opinión pública, y si bien hubo marcadas disputas en el seno partidario, los resultados de las urnas posicionaron a Leslie Roberts, de Unidos y Organizados, como “el” candidato del denominado Frente Patriótico Chubutense. No obstante, hasta el momento no trascendió de manera oficial o explícita si el resto de los candidatos se encolumnarán detrás del elegido para capturar una mayor porción del electorado; de hecho, ya se habla de que un sector del PJ ligado a dirigentes “históricos” habría comprometido su apoyo a Gustavo Sastre, militante del PJ que, en medio del berenjenal político de dicho espacio, decidió ir sólo bajo la insignia de “Madryn al Frente” y prácticamente igualó el porcentaje del resto de los candidatos correligionarios que competían por otro espacio.

La llamada perdida

Días antes de que se celebraran las PASO en Puerto Madryn, uno de los precandidatos del justicialismo, Luis Catalán, convocó a propios y ajenos para presentar una denuncia por presuntos maltratos ejercidos por un militante del sastrismo hacia una mujer que se encontraba repartiendo volantes; el “misil” iba directamente hacia Fernando González, referente del PJ local quien había manifestado su apoyo a la precandidatura de Gustavo Sastre, y si bien hubo “mucha espuma” en un principio, no se supo explicar, en aquél momento, si la denuncia ya había sido radicada en Fiscalía, o bien si iba a ser efectuada por la presunta víctima. En definitiva, “mucho ruido”.
Acto seguido, desde el espacio que se arrogaba la representación del justicialismo viralizaron un llamado telefónico en el que el precandidato de “Madryn al Frente” le propinaba una serie de insultos a un candidato a concejal de Catalán; la estrategia, no obstante, no “picó” en la opinión pública, teniendo en cuenta que Sastre, rápido de reflejos, salió a contar la otra parte de la discusión, que tenía que ver con la viralización de fotos falsas en perjuicio de su hija. Una bomba que se desactivó a tiempo y que dejó parado a más de uno dentro del espacio “denunciante”.

Piedras invisibles

La otra situación ocurrió un mes después de las primarias, cuando el presidente de una asociación vecinal y un candidato a concejal por el Frente Patriótico salieron a denunciar que habían sido denunciados mientras recorrían la zona del Alta Tensión; dijeron que les habían arrojado piedras, advirtiéndoles que no podían entregar información política en ese barrio, también amenazándolos con un arma de fuego desde un auto. “Estos hechos demuestran que quienes tienen el poder municipal niegan la posibilidad de la participación democrática, porque su esencia es acrecentar los derechos y privilegios de pocos en detrimento de muchos”, señalaron desde el Frente Patriótico, tras confirmar que la denuncia fue radicada en la Seccional Segunda el mismo día.
Sin embargo, ante la falta de pruebas, la misma no trascendió, e incluso la opinión pública tampoco “hizo lugar” a lo esgrimido desde ese espacio.

Fake news

Ante la falta de efectividad de este tipo de denuncias, la “campaña sucia” siguió su curso e incluso se hizo extensiva a otros candidatos; uno de ellos, el concejal por Cambiemos, Claudio Tortoriello, del cual se viralizó un video del local de campaña ubicado frente al Shopping, bajo la leyenda de que “ya están desarmando el local porque saben que no ganan”.
Quien registró el video, empleado de un comercio ubicado en las inmediaciones, buscó obtener un rédito político bajo la estrategia de las “fake news”, y desde el propio espacio identificado con el Gobierno Nacional salieron a desmentir lo vertido en redes sociales, confirmando que se estaban retirando unas placas de durlock como parte de la limpieza habitual del local.

Desamparados

También, los “misiles” trascendieron a los candidatos y también fueron dirigidos a la administración municipal, luego de que dos versiones diametralmente opuestas circularan por los medios durante el fin de semana pasado; la primera, confirmando que el amparo presentado por el Municipio ante Cammesa había sido rechazado.
La segunda, confirmando desde el Juzgado Federal que el amparo había sido admitido.
Desde el Estado Municipal, uno de los funcionarios de primera línea explicó que, si bien la medida cautelar que solicitaba no declarar “moroso crónico” a la Cooperativa había sido rechazada, el amparo sí había tenido lugar; por ende, la única lectura que pudo hacerse de esa diferencia de criterios es que la misma estuvo fundada en una intencionalidad política.

Una zona gris “muy gris”

Este tipo de situaciones, observadas desde afuera y en su conjunto, plantean la necesidad de repensar la política; suele decirse que, cuando la discusión política escala hacia lugares inusitados, es porque lo que flaquea es el abanico de propuestas.
Al mismo tiempo, los mismos ámbitos desde los cuales trascendió la mayor cantidad de denuncias y “chicanas”, se caracterizaron por no haber realizado una propuesta superadora, al menos en lo técnico, de cara a las verdaderas problemáticas que tiene la sociedad.
Ello lleva a reflexionar respecto de si se puede hacer campaña “a cualquier costo” para ganar una elección, y viajando más profundo en el abismo de la política, esto obliga a pensar cuál es el motivo por el que tal o cual espacio busca hacerse con la administración local; si sobran denuncias y faltan propuestas, las intenciones resultan poco menos que claras.

ÚLTIMAS NOTICIAS