Tras una audiencia realizada este viernes, el caso de A.R. que conmocionó a la ciudad de Comodoro Rivadavia, parece tener un vuelco. Mientras la Fiscalía representada por Cecilia Codina pedía que se considere “homicidio agravado por ser contra un descendiente en carácter de autor”, un delito que implicaría prisión perpetua, la Defensa tenía expectativas de conseguir el sobreseimiento de A.R. tras la presentación de pruebas que daban cuenta de la situación de vulnerabilidad y violencia económica y física a la que era sometida. Sin embargo, el juez natural de la causa Mariano Nicosia consideró una imputabilidad intermedia en la cual la clave es la atenuación.
En este contexto, A.R. irá a juicio imputada por “homicidio agravado mediando circunstancias de atenuación”, un delito que prevé una pena de ocho años de prisión efectiva, una pena por demás alejada a la solicitud de la Fiscalía.
“También se morigeraron las condiciones de encierro, se definió que no continuará con prisión domiciliaria dado que no existen peligro de fuga ni peligro de entorpecimiento de la causa es que deciden no cortarle la libertad aunque deberá tener presentaciones permanentes en la justicia y no puede salir de la ciudad”, confirmó su abogado el doctor Mauro Fonteñez.
El profesional sostuvo que “en principio estamos conformes con esta decisión porque no solamente cambia la situación procesal sino también jurídica, la vulnerabilidad y el tema de la violencia de género no fue discutido por el juez , nosotros desde un primer momento expusimos que ella no fue capaz de comprender la criminalidad del acto, no hubo premeditación a ella la encontró esta situación cuando estaba en el ámbito laboral, atravesó por todo ese dolor, y nunca tuvo aún la oportunidad de hacer un duelo por la pérdida de su hija”, describió el Defensor. (El Patagónico)