Por Trivia Demir

“Si la construcción de poder de la alianza triunfante en Chubut comienza con peleas por repartos, están complicados”. La frase sonó fuerte y claro en una bien servida mesa porteña, que además tenía bastante claros los números de la provincia. Mucho más tal vez que los propios provincianos. Y dicen que vino a tema tras todos los trascendidos sobre el modo en que el gobernador Mariano Arcioni encara su mandato, y sobre los numerosísimos frentes de resistencia internos y externos que enfrenta.
Y en ese marco, si al primer plato los comensales especulaban sobre lo que ´no se debería hacer´ y ensayaban recetas con apenas un puñado de datos; para los postres y después de conocer detalles de lo que efectivamente ´se viene haciendo´, había fundados temores de que estemos frente a una estrategia de desgaste de masa “al mejor estilo Mamarelli” e incluso “una renuncia en puerta”. “De otro modo no se entiende tanta impericia oficial toda junta”, afirmaron antes de pedir el bajativo.

Cargos en el aire

La situación vino al caso por las fricciones que se comenzaron a producir por cargos en uno de los principales ´botines de guerra´ de reparticiones públicas donde aún se cuentan dinero, y ese es el Banco del Chubut. Como se sabe, y tal el escenario de colapso que proyecta la caja pública, muy pocos aspiran a integrar el Ejecutivo, pocos están en condiciones de aspirar a los cargos vacantes en el Judicial, mientras que las cartas ya están dadas en el Legislativo, excepto en los tres cargos nacionales en juego que se definirán en octubre.
Por eso, como ya se dijo desde estas páginas hace unos meses, la gran disputa sería por el control y los cargos en la casi docena de empresas que posee el estado chubutense, donde se gana bien, se puede hacer negocios y donde existe importante independencia de Fontana 50.

Directorio sobrevendido

Ni bien culminada la elección anticipada de junio, el primer y contundente ruido de pulseada política fue por los sillones en el directorio del Banco del Chubut. Una entidad que no fue fácil recuperar del colapso en la que lo sumió la política de turno en complicidad con la codicia permanente. Y en ese marco, hace unas semanas se promovió la salida de Pablo Das Neves, hijo del exgobernador fallecido, entendiéndose que había cumplido su ciclo en el entramado dominante de estación. A partir de esto, la ronda de nombres no ha parado, alternándose sin disimulo los promovidos por el gobernador electo Mariano Arcioni y el ruedo comodorense, y los sugeridos por el vicegobernador electo Ricardo Sastre y el ruedo madrynense.
El primer nombre en ser promovido fue el de un empresario de Madryn, que tuvo consenso, pero no aceptó el cargo por cuestiones estrictamente personales. A su turno, surgió el nombre del abogado comodorense Rodrigo Gaitán que tenía fuerte injerencia en casi todos los sectores. Y cuando parecía que estaba todo dicho, ayer empezó a sonar el nombre del actual secretario de Hacienda de Madryn, contador Carlos Tapia.
Según los primeros datos mediáticos, Tapia aceptaría el cargo, aunque restaría un decreto firmado por el gobernador para oficializarlo. Y según afirmaba ADN Sur “Tapia presentó se renuncia como secretario de Hacienda de la Municipalidad de Madryn -que actualmente conduce Ricardo Sastre, vicegobernador electo- para poder asumir próximamente como director del Banco del Chubut (sic)”.
Carlos Tapia por su parte fue cauto y explicó que “No doy por sentado nada”. “Estamos en ese proceso, pero es todo un desafío y esperamos estar a la altura de las circunstancias”, dijo a Canal 12 de Madryn. Mientras que por la red del pajarito, el propio intendente confirmaba la versión: @ric_sastre: “A partir de las próximas horas @LCarlostapia dejará el cargo de Hacienda en el Municipio para integrar el Directorio del Banco Chubut. Lo reemplazará otra empleada de carrera, Vanesa Cabrera, que era la elegida para conducir el área en la Gestión de @Gus_Sastre #Madryn #Chubut”
Pese a esta versión que se daba por concluyente, ayer al cierre de esta edición se esperaban ecos de la asamblea del directorio del Banco en la cual se abordaría este tema, previéndose le posible entrada en otro cuarto intermedio, debido a que no estaban aprobados los pliegos en el Legislativo, por lo que mal se podría definir algo.
El presidente del Banco del Chubut, Julio Ramírez lo sabe, como sabe también que la oposición no está dispuesta a aprobar si no se accede a ´negociar´ otras cosas que ya pidieron al Ejecutivo.

No tan rápido

En concreto y según trascendió entre los diputados del PJ, el trueque es por un cargo en el Superior Tribunal y uno en la sindicatura del propio Banco. Es más, para el STJ, también habría sobreexistencia de candidatos con aspiraciones y ´talentos´, entre los que figurarían el siempre vigente doctor Blas Meza Evans, actual diputado provincial que culmina mandato en diciembre; el exdiputado provincial y exdirector del Banco del Chubut, doctor Alejandro “Pinda” Fernández Vecino, quien en 2016 ya integró la sala civil del Superior en carácter de conjuez, y el exvicegobernador y exintendente doctor Gustavo Mac Karthy.
En relación a ocupar la sindicatura, no trascendieron nombres aún, pero se infería que sonarían para quienes no lograran el ´primer premio´ con el cargo en el STJ. Y como negociador de toda esta ´timba´ de tome y daca la mayoría identificaba al diputado provincial electo, Carlos “Ganso” Eliceche, ex director del Banco y que ya empezó a relamer sus fueros y su retorno a la rosca capitalina.

El globo y el pinchazo

Si bien la pulseada por uno de los sillones del directorio de la entidad bancaria se consideraba ganada por las fuerzas madrynenses, los conocedores del paño saben que nada está definido hasta que no se proceda, y que en materia de poder, no existen los amigos. Dicen que Eliceche por un lado entusiasmó a Sastre para tirar el nombre de Tapia, un profesional reconocido que le permitió al intendente mantener el orden financiero del Municipio y proyectarse, algo que “El Ganso” no perdonó nunca del todo. Pero la habilitación habría sido sólo de palabra y para el asador. Ya que por otro lado, ya le habría tirado los argumentos a la oposición para ´rebotarle´ el principal candidato de Sastre.
Esto podría parecer demasiado conspirativo para un solo capítulo, pero sólo para quienes no conocen a la ´criatura´ voladora. Porque para cuando caía el sol, los ´lobos del poder´ se relamían analizando los argumentos y contando en su haber ya tres cuestionamientos internos en el directorio en camino, contra la postulación de Tapia, afirmando que por “el artículo 264 inciso 4 de la Ley 19550”, dice que no pueden ser directores: «Funcionarios de la administración pública (sic) cuyo desempeño se relacione con el objeto de la sociedad hasta 2 años después que cese el cargo». Bajo este argumento, que Eliceche conoce muy bien por haber sido él mismo director, Tapia no podría asumir en el banco tras haber administrado fondos públicos financieramente como titular de Hacienda. “Es lo mismo que le pasó a Alejandro Garzonio cuando dejó de ser ministro y quiso ir al banco y no podía por haber sido ministro de Economía, y por eso correría el riesgo en el caso de Tapia que cuando lo informen oficialmente, lo veten en el propio Banco Central de la República Argentina”, especuló una fuente cercana a la entidad. Otros opinaban que el artículo se referiría a la “administración pública ´provincial´” y que al tratarse de una función previa “municipal”, no estaría alcanzado por la normativa.
Cómo sea, posiblemente cuestionado otro nombre más de los que salieron demasiado rápido al ruedo, Eliceche y parte de la mesa chica del PJ, matenían ayer mismo viva la fortaleza de una oposición que perdió las elecciones, pero que desde las sombras sigue poniendo condiciones y funcionarios para los cuatro años que vienen, haciéndole honor al ilustre Maquiavelo que decía: “Nunca intentes ganar por la fuerza lo que puede ser ganado por la mentira”. Habrá que ver…