La referente de la Comunidad Internacional de Mujeres Viviendo con VIH SIDA (ICW), “Gachy” Awad, se refirió a la jornada de “formación de formadores” realizada esta semana en Puerto Madryn, de la cual participaron integrantes y autoridades de distintos ámbitos públicos y privados, con el objetivo de abordar una agenda conjunta respecto de la discriminación en materia de género, entre otras cuestiones.
En diálogo con El Diario, remarcó la necesidad de “vaciar la ‘caja’ que cada uno tiene dentro de su cabeza” y evitar los prejuicios, advirtiendo que “todas las personas tenemos derecho al trato digno e igualitario; y desde ese espacio y ese lugar, podemos construir una mejor sociedad”.

Amplia participación

Al respecto, Awad se refirió a la jornada de capacitación y destacó que “no esperábamos tanta concurrencia, tuvimos más de 45 personas tomando la formación, tanto de Trelew como de Rawson, Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn; en definitiva, de toda la provincia y todos los ámbitos como la Salud, Educación, Enfermería; estuvo la directora del Programa de Prevención de Patologías Prevalentes, quien nos acompañó y lo cual es importante destacar” y puso en relieve que “justamente, se busca dar las herramientas para que, dentro de los sistemas de salud y educación públicos y privados, se pueda llegar al nivel de ‘cero’ estigma por la discriminación en materia de diversidad sexual y orientación de género”.

Los prejuicios, a la orden del día

Consultada sobre las estructuras sociales y culturales que todavía dan lugar a conceptos de “normalidad” que suelen dar lugar a históricos prejuicios, “Gachy” reconoció que “la verdad es que fue muy auto evaluativo para todo el personal de Salud que estaba, ya que ellos se planteaban que en algún momento de sus tareas estaban discriminando; cuando uno habla de discriminación, lo hace desde la persona que lo recibe en la mesa de entrada, hasta todas las personas que conforman esos espacios y lugares en los cuales hay que trabajar, no solamente con un enfermero y un médico, sino también con personal administrativo, psicólogos y sociólogos; porque la discriminación empieza desde el momento en que se abre una puerta y ya es una oficina; o en un espacio de salud, una escuela o donde fuera, por eso es interesante trabajar sobre los propios ‘auto estigmas’ que tenemos”.

Discriminación

El camino es la deconstrucción, sostuvo Awad: “Uno de los formadores, oriundo de Portugal y que recientemente ha disertado en Ginebra, ironizaba que hay que ‘evangelizar’ usando este lenguaje inclusivo desde la perspectiva de Derechos Humanos, que en definitiva es lo que necesitamos, trabajar más en la inclusión de la otra y del otro, no solamente en materia de diversidad sexual, orientación de género, VIH, sino desde todos los lugares. También, trabajamos en lo que hace a personas con capacidades diferentes, otras con algún consumo problemático de sustancia. Se abordaron todas las temáticas en las cuales hoy existe discriminación”.

“Vaciar” la caja

Consultada sobre si se trabajó en el intento de “derribar las barreras” propias de quienes han atravesado episodios de discriminación, Awad puntualizó que “también se aborda muchísimo en talleres dinámicos y participativos, sin que fuera una formación estática” y explicó que “hubo un ejercicio muy interesante sobre las ‘cajas’ que cada uno tiene dentro de su cabeza, qué es lo que ponemos dentro de la misma y la necesidad de sacar esas ‘cajas’, romperlas y llevar una vida de colores; no podemos dedicarnos a un ‘verde’ o a un ‘gris’, necesitamos ponerle colores a la vida”.
De este modo, remarcó la necesidad de “apostar a la diversidad desde la perspectiva de Derechos Humanos, ya que todas las personas tenemos derecho al trato digno e igualitario; y desde ese espacio y ese lugar, podemos construir una mejor sociedad”.

Cambiar la mirada

Formarse en dicho segmento “abre la cabeza a un montón de cosas”, consignó Awad, sumando a ello que “surgieron un montón de planteamientos y cuestiones que los mismos proveedores del sistema de Salud, hasta se replantearon sus formas y actitudes; este es el impacto que genera el cambio de mirada y visión, ya que esta formación está muy atravesada por lo que hace a los Derechos Humanos”.
También, destacó la presencia de autoridades provinciales y municipales, así como también de concejales: “Fue una convocatoria espectacular, de una magnitud que no nos esperábamos. Cuando se hace trabajo en equipo y con organismos públicos, privados e institucionales, desde la sociedad civil tenemos mucho para aportar”.