El secretario general de Empleados Municipales Agremiados de Rawson, Samuel Vargas, reconoció que se hizo efectivo el pago de sueldos del mes de junio a todo el personal de planta del Municipio, pero aún resta pagar a contratados, horas extras, cubrir la ART y otros cargos, por lo que decidieron continuar con las medidas de fuerza.
El paro continuará por tiempo indeterminado ya que a la fecha no hay novedades sobre el pago de los haberes del mes julio, cuyo plazo de cancelación ya está vencido.
Vargas se refirió a los cuestionamientos que formuló la intendenta Rossana Artero, quien calificó de violentos a los empleados municipales que están protestando frente al edificio municipal por haber agredido a dos funcionarios de su administración.
“No apoyamos ningún acto de violencia, pero la violencia en realidad es contra nosotros”, dijo Vargas quien describió la situación de empleados que tuvieron que pedirle plata a sus padres para pagar el alquiler o pagar los servicios.
En ese contexto, el dirigente sindical remarcó que “la intendenta Rossana Artero no fue nunca a la Municipalidad de Rawson desde que supuestamente se restituyó, porque no se la vio por el edificio de Moreno 650 y se supone opera con su gabinete desde la oficina de turismo en Playa Unión”.
En cuanto al manejo contable de la Municipalidad y los ámbitos de recaudación, el secretario general del EMA reconoció que está a cargo de una empleada de Tesorería a quien identificó como Nadia Aguilar, quien “está operando virtualmente como Secretaria de Hacienda”.
El colapso por la abundante acumulación de basura en toda la ciudad, como resultado de cuatro semanas sin servicio de recolección, es uno de los datos alarmantes de este conflicto que no tiene una salida a la vista.
Rawson está tapada de basura, y no hay un plan de contingencia por parte de las autoridades municipales. Cientos de bolsas han sido rotas por los perros, con lo cual, hay residuos esparcidos por todos lados. Este escenario, resulta altamente preocupante ya que con el transcurrir de los días, la basura no solo entra en descomposición, y literalmente se pudre, sino que se corre el riesgo de una plaga de roedores en toda la ciudad, tal como ha ocurrido en otras localidades que han debido enfrentar situaciones similares.