Los resultados de las primarias que colocaron a Alberto Fernández como el candidato presidencial más votado obligaron a barajar y dar de nuevo en lo que se refiere al escenario político. Tal como era de esperarse, la Justicia federal no quedó exenta de esta situación.
En Comodoro Py se olfatean tiempos de cambios y los nuevos aires incluye un giro con un meta mensaje hacia el presidente Mauricio Macri: ratificación de la causa Correo y anulación de fallo que procesaba a exfuncionarios kirchneristas.
El Gobierno parece haber recogido el guante al menos desde el punto de vista discursivo. El ministro de Justicia Germán Garavano pidió a la Justicia que dicte sus fallos «conforme a la ley y no a los resultados electorales».
«Quiero creer que son fallos dictados conforme los expedientes judiciales. Más allá del voto de la ciudadanía, creo que hay cosas que no vamos a tolerar y eso es la impunidad. Me parece que en eso la Justicia tiene que seguir y aplicar conforme la ley y no a los resultados electorales», afirmó el titular de la cartera judicial en diálogo con radio La Red.
En ese sentido, sostuvo que «si hicieran lo contrario, se equivocarían y generarían un retroceso respecto de lo que se logró en estos tres años de trabajo», en los que afirmó que se avanzó en medidas para «desterrar la impunidad para siempre en la Argentina».
El ministro se refirió así a la decisión adoptada por la Cámara Federal de Casación Penal que anuló los procesamientos del exministro de Planificación, Julio De Vido, y otros funcionarios en la causa por presuntos pagos de sobornos de la empresa Odebrecht en la obra del soterramiento del tren Sarmiento.
Sin embargo, sobre la actuación del camarista Martín Irurzun, quien también rechazó cerrar la causa por la privatización del Correo, en la que se juzga a familiares de Mauricio Macri, dijo que se trata de «un juez serio» y manifestó que «habrá tenido razones para pronunciarse en este sentido».
(Fuente: Ámbito Financiero)