La economía de Chubut sigue sin acomodarse y los sueldos de los trabajadores de la Administración Pública seguirán abonándose de manera escalonada, según las confirmaciones de los principales referentes del Poder Ejecutivo. No obstante, en las últimas horas circularon versiones que aseguraban que el depósito de haberes se acortaría de tres a dos tramos, aunque esto fue desmentido casi inmediatamente.
El ministro de Economía y Crédito Público de la Provincia, Oscar Antonena, aseguró ayer que la primera vez que oyó sobre esta posibilidad fue a través de los medios de comunicación. Asimismo negó de plano que esto pudiera ocurrir en el futuro inmediato, afirmando que “estamos procesando los fondos que ingresan día a día, tenemos ingresos que mañana (por hoy) se tienen que procesar y se comprometió un monto de 1.700 millones de pesos”. Además, en una entrevista con La 100.1 de Comodoro Rivadavia, el ministro explicó que tuvieron que adecuar “el flujo de tasas a los fondos”.
“Hoy (por ayer) estamos trabajando para completar el tercer rango, pero hablar de reducción de rangos corre por cuenta del que lo ha publicado. El gobernador (Mariano Arcioni) es el que toma la última decisión”, remarcó Antonena. En este sentido, vale recordar que hoy está previsto que se depositen los sueldos correspondientes a agosto para todos los trabajadores estatales que cobren más de 65.000 pesos, según el cronograma establecido por el propio Gobierno Provincial.
En este sentido, el titular del Ministerio de Economía y Crédito Público manifestó que “tenemos que atender y continuar lo planificado para los próximos meses”. Además, señaló que “oportunamente se va informar el próximo cronograma de pagos”. Por último, el ministro indicó que queda pagar “sólo el 20% de los salarios”, y también admitió que “estamos demorados pero cumplimos con los fondos».

Emisión de letras

En este contexto desfavorable para las arcas chubutenses, vale recordar que la Provincia tiene todavía una disponibilidad de 2.650 millones de pesos para emitir Letras. Esto se deba a que recientemente el Banco Central de la República Argentina había autorizado hasta 3.250 millones, mientras que a fines de agosto la administración de Arcioni colocó 500 millones de Letras a una tasa del 69%.
Esto último no es un dato menor, ya que ahora la idea del Gobierno es una nueva emisión, pero esta vez por 1.300 millones de pesos. Lo que hay que tener en cuenta es que seguramente la tasa se bastante más elevada que el 69% de fines de agosto, debido a los constantes escenarios conflictivos que está atravesando la Provincia y la incidencia de credibilidad ante el mercado financiero.
Si bien se prevé que la emisión de letras se concrete en la jornada de hoy, la nueva toma de deuda por parte del Poder Ejecutivo no pasaría de la semana que viene. Por su parte, desde el Gobierno Provincial son optimistas y aseguran que ya hay varios interesados en adquirir estas Letras.

Vuelta a las aulas

En cuanto a la finalidad de esta inminente emisión de Letras, aseguran que sería un instrumento para poder hacer frente a los sueldos correspondientes al mes de septiembre, que se abonarán en el transcurso del mes de octubre, a través de un cronograma que todavía no fue anunciado oficialmente.
En tanto, con el objetivo de que se retomen las clases en los establecimientos educativos de Chubut, desde el Gobierno analizan incluir en el primer rango a todos aquellos trabajadores que dependan del Ministerio de Educación. En caso de ser así, todos los docentes, auxiliares y administrativos del sector, sin importar los montos de sus haberes, estarían cobrando en el primer turno del pago escalonado.
No obstante, vale destacar que esto no garantizaría íntegramente el retorno a las aulas, recordando que cuando se terminaron de cancelar los haberes de agosto los docentes continuaron con las medidas de fuerza, debido a que su reclamo va más allá del pago de sueldos. Los empleados nucleados en la Asociación de Trabajadores de la Educación de Chubut (ATECh) también realizan los paros para exigir la normalización de la obra social SEROS y la refacción en varios establecimientos educativos.

Deuda pública nacional

En otro orden, en un marco de fuertes restricciones financieras, que se profundizaron después del contundente triunfo de la oposición en las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), la Secretaría de Finanzas de la Nación divulgó su informe sobre deuda pública de la administración central actualizado al cierre de agosto, con un dato promisorio: el retroceso de los pasivos brutos a 307.000 millones de dólares, el monto más bajo desde el último trimestre de 2017, dos años atrás.
La deuda bruta en situación de pago normal se situó el mes pasado en 307.570 millones de dólares, con una baja de más de 32.000 millones de dólares o 9,4% respecto de los 339.416 millones de dólares reportados en julio. Este monto es incluso inferior a los 307.656 millones dólares al cierre del tercer trimestre de 2018.
Dos factores se identifican en este importante recorte de pasivos, según la información preliminar. Por una parte un nuevo capítulo de la devaluación del peso, cuando el tipo de cambio saltó del nivel de 45 pesos por dólar a 60 pesos después de la victoria de la fórmula encabezada por Alberto Fernández, del opositor Frente de Todos, en las PASO del 11 de agosto.
Por otro lado, se produjo la cancelación anticipada de un REPO (Repurchase Agreement) asumido con bancos, que permitió rescatar bonos por un valor nominal de 12.800 millones de dólares.
El 20 de agosto, el Ministerio de Hacienda de la Nación debió adelantar la cancelación de contrato de recompra (REPO) que había sido acordado con bancos internacionales para robustecer las reservas internacionales en 2016, debido al desplome del valor de los bonos soberanos que se habían dado en garantía. Entonces, el Tesoro desembolsó 2.615 millones de dólares que, al eliminar los intereses a pagar a futuro, significó una baja de la deuda cinco veces mayor.
La cancelación del REPO permitió rescatar 5.948 millones de dólares en Bonar 2024, 4.019 millones de dólares en Bonar 2025 y 2.842 millones de dólares en Bonar 2037.

Situación delicada

Más allá de la “buena nueva” de la reducción de la deuda pública, uno de los mayores problemas que la administración de Macri lega al gobierno que surja de las elecciones de este año, la situación financiera del país es muy delicada, lo que llevó al ministro Hernán Lacunza a anunciar un “reperfilamiento” de los vencimientos.
Vale recordar que el 28 de agosto, el titular del Ministerio de Hacienda dio detalles del decreto que habilitó la postergación de los vencimientos de títulos de corto plazo (Letes, Lecap, Lecer y Lelink), que en los hechos se interpretó como un default selectivo, pues extiende el plazo de pago hasta la llegada de la nueva administración del equivalente a unos 13.000 millones de dólares.
También hay que considerar que en el último año la deuda pública de Argentina se había estabilizado en torno a los 320.000 millones de dólares, después de haber arribado a un acuerdo stand by con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un total de 57.000 millones de dólares, que implicó recibir créditos del organismo para pagar vencimientos de deuda privada. Por lo tanto, a partir del acuerdo la deuda dejó de aumentar, aunque se fue cambiando de acreedor.