Según se confirmó al inicio de esta semana, los vuelos desde Puerto Madryn hacia Buenos Aires y viceversa, fueron garantizados por la empresa Andes Líneas Aéreas, desde la cual se encuentran atentos a una eventual resolución por la falta de pago de una millonaria deuda del Gobierno Provincial, la cual asciende a poco más de 180 millones de pesos.
En la próxima Sesión de la Legislatura provincial, que eventualmente tendría lugar el jueves en caso de que los trabajadores de APEL levanten la medida de fuerza, se trataría el proyecto para que la administración chubutense abone con Títulos de Cancelación de Deuda Provincial (TICADEP) la deuda que se generó por el incumplimiento del acuerdo rubricado entre ambas partes, que preveía el aporte de unos 14.500 pasajes para funcionarios provinciales y afiliados a Seros por parte de la aerolínea, a cambio de unos 6 mil metros cúbicos de combustible JP1 por parte de la Provincia.
Mientras que desde el Gobierno Provincial confirmaron las gestiones para la reanudación de los vuelos para el pasado martes y el miércoles de esta semana, también trascendió que, días atrás, el intendente Ricardo Sastre también mantuvo diálogos con autoridades de la aerolínea, con el fin de garantizar la conectividad en la ciudad del Golfo, que registró un nuevo récord de visitantes tras el feriado largo.

Vuelos confirmados

Por su parte, el presidente de la empresa, Horacio Preneste, indicó en diálogo con los medios que se retomarían los vuelos a Puerto Madryn, asegurando que “vamos a volar, pero como cuestión nuestra y una vez más vamos a creer en las promesas que nos han hecho de resolver los temas”, a la vez que criticó que “ya llevamos dos años creyendo en todo esto y seguimos creyendo”.
Las declaraciones fueron realizadas a más de una semana de que la aerolínea estuviera sin operar en el Aeropuerto “El Tehuelche”, hasta que finalmente fueron confirmados los vuelos del martes y del día de hoy.
Según el titular de la firma, “tenemos mucho puesto en la ruta esta, mucho compromiso con la comunidad de Puerto Madryn, es un tema que nos obliga”, aunque también advirtió que “hay muchos inconvenientes por el tema de la falta de resolución de la relación con Chubut”.

Abiertos a propuestas

Asimismo, Preneste confirmó que hace unos días habían dejado de operar por la extensa deuda que desde 2016 el Estado Provincial mantiene con la aerolínea, a partir del convenio de intercambio de pasajes por combustible, que permanece vigente y frente al cual solamente se habría abonado, desde el Gobierno, el equivalente a poco más de 400 metros cúbicos de los 6 mil establecidos en el convenio. El monto que ahora reclaman asciende a más de 180 millones de pesos, y si bien la empresa aclaró que se encuentra abierta a distintos tipos de soluciones, también remarcó que los tiempos planteados en su momento por el Gobierno Provincial son insostenibles para la firma.
Por otro lado, Preneste expuso que “se ha hecho un recorte para que se pueda ejecutar pronto, pero la voluntad nuestra esta puesta, ahora estamos esperando la voluntad de la provincia”, así como tampoco descartó que se reúna con autoridades provinciales esta semana, en aras de destrabar el conflicto.
En este contexto, recordó que “hemos invertido mucho, es todo dinero nuestro pero en esta situación de crisis es complejo seguir con semejante faltante de capital de trabajo”.

Devolución de pasajes

Otro de los actores que se manifestó al respecto fue el titular de la Asociación Patagónica de Agencias de Viajes y Turismo y de la Confederación de Organizaciones Turísticas de América Latina, Guillermo Schneider, quien planteó que “es lamentable lo que está pasando con Andes, nosotros hemos visto que esta empresa tiene enormes oportunidades de conectividad pero lamentablemente el Gobierno Provincial, durante más de un año, no abonó la deuda que mantiene por subsidio de combustible y ya llega al orden de los 180 millones de pesos”.
Por dicha razón, expresó, dejó de operar porque no podía superar los problemas financieros que tiene”, sumando a ello que, si bien la devolución del dinero de los pasajes se fue realizando de manera gradual a los clientes, “con esa plata no pueden comprar ni un boleto de ómnibus”.