Por Trivia Demir

A días que se dirima la conducción política a nivel nacional, en Chubut muchas otras definiciones también están pendientes. Más allá de las especulaciones electorales o las proyecciones partidarias, el gran interrogante que flota en el aire por estos días es ¿quién tiene el poder real en la provincia? Y para responder esto se deberá esperar y comprender que sucederá políticamente en la ciudad más grande y más pesada electoralmente que es Comodoro Rivadavia.
Está dicho que la ´avivada´ electoral de anticipar la definición provincial en junio a todas luces la ganó Chubut al Frente, aunque eso le implicara a Mariano Arcioni tener que sostener en soledad y a costa de desgaste de su propia imagen, los más de seis meses que separan de la toma de la nueva gestión que se producirá en diciembre. Esto lo logró mediante alianza electoral con las dos principales ciudades del Valle, Trelew y Madryn, y en el ´mientras tanto´, la ´ciudad estado´ por excelencia, se guardó para las definiciones elementales, atada a la compulsa nacional del 27Oc.
Para los ´científicos del poder´ la ecuación parecía bastante sencilla: ´adelantemos tranquilos que después reunificamos fuerzas en Comodoro y el poder se consolidará sólo´. Traducido, la estrategia implicaba desde el ´vamos´ jugar todo el peronismo (el partidario y el expulsado) con Juan Pablo Luque y garantizar el triunfo de la ´continuidad´ del oficialismo municipal, pero con diferencias evidentes. Algo así como un desplazamiento de la continuidad que de tan evidente, no se note.

Secreto a voces

Así las cosas, la sumatoria electoral del exgobernador Martín Buzzi se podría entender como una ´cocinada´ acordada y cantada. Sobre todo si se considera que al peronismo ortodoxo le ´molestaba´ la postulación del exmandatario por ese sector sobrevendido, y más allá que a un gran número de dasnevistas o chusoteanos se terminaran ´tragando el sapo´ que el mayor perjuro del fallecido don Mario, sea uno de los tres candidatos propios. Al final de cuentas era para todos un secreto a voces que tarde o temprano, ´Tincho´ sería literalmente sacrificado, tal como fue, debiendo bajar su lista luego de las PASO.
En el medio hay una cuestión personal y familiar relacionado al exgobernador absolutamente entendible, que lo ayudó a desembarazarse del trabajo de pinzas y excusarse de salirse de la contienda electoral, pero en el fondo de lo que se trata es de salvar las ´pilchas´ de una estampada en las urnas que le significaría su futuro político. Para Buzzi, como para otros comodorenses con proyección, vale aún la máxima “soldado que huye, sirve para otra guerra” y de hecho ya se habla de un rol exclusivo para Buzzi en las lides mayores bonaerenses a partir de diciembre en su carácter de asesor. Todo, por el módico precio de bajarse a tiempo.

Se baja pero no se desmaterializa

Pero como todos los acuerdos, al parecer, el de la retirada de Buzzi también traía una letra chica que pocos leyeron en el entusiasmo original. Se bajó, pero no oficialmente. Este intríngulis al parecer es el que se está digiriendo el candidato más firme para liderar los destinos de Comodoro, que sería Juan Pablo Luque. Resulta que los últimos esfuerzos de campaña los está aplicando el candidato a intendente por el Frente de Todos a tratar que se quiten las boletas de Martín Buzzi en el cuarto oscuro el próximo 27 de octubre. Algo que se daría por hecho, y que ocasionaría una gran confusión en el electorado, y por lo cual el candidato ya anticipó que hará una presentación ante la Justicia.
“Buzzi y Béliz anunciaron públicamente que bajaban sus candidaturas pero en principio van a estar las boletas en el cuarto oscuro”, lamentó Luque y agregó que “me parece que es poco serio ese tipo de actitudes, teniendo en cuenta que ambos conocían perfectamente cuáles son los tiempos electorales como para poder decidir, participar o no” en la elección.
En ese contexto y atento a que las autoridades electorales han anticipado que la boleta estará en el cuarto oscuro porque “no se formalizó la baja de la candidatura de Buzzi” en tiempo y forma, Luque recordó que el exgobernador, “expresó su voluntad formal de deponer su candidatura y haber decidido que no va a participar junto con su fórmula, tengo entendido que algunos concejales también. De manera tal que, los apoderados de los diferentes partidos políticos estarán requiriéndole al Tribunal Electoral y a la Justicia Electoral una aclaración respecto a cómo va a ser ese acto electoral”, sentenció el Viceintendente de Comodoro Rivadavia.

Armado ‘a medida’

De todos modos, los votos que eventualmente pueda obtener la fórmula del exgobernador y el exbasquetbolista Gabriel Cocha el próximo domingo serán anulados. Pero en cambio sí se computarán los votos de la lista de concejales que encabeza Fernando Cambareri, actual secretario privado del gobernador Mariano Arcioni e hijo de Rafael Fortunato, el influyente asesor del gobernador. En los primeros lugares, la boleta se completa con Marcela Paz, Cristian Fierro, Norma Contreras y David Klappenbach. Justamente, este fin de semana fue la actual concejal Contreras quien le reprochó a Buzzi haber adoptado la decisión de no presentarse sin consultar antes con el conjunto de la lista. “Nos hubiéramos preparado de otra forma”, dijo quien llegó a su banca en 2015 por Chubut Somos Todos.
El tema no es menor considerando que un 8% que es lo que sacó Buzzi en las PASO ubicándose cuarto, termina compartimentando mucho el poder a definir, sobre todo en la definición del legislativo.
Al quedar ´andando´ la lista de concejales, hay una elección legislativa casi aparte, con concejales que no tendrán representación ejecutiva. Una especie de ´armado de poder´ a medida.

Cosas del ‘arquitecto’

Por esto y por otras tantas cosas que se desprendieron del ´exceso de rosca´ electoral en la provincia, es probablemente que se anticipara el despegue del PJ Chubut respecto de Chubut al Frente remarcando que más allá de la alianza de Arcioni-Sastre con Alberto Fernández, en la provincia no se consideran “lo mismo”. Para los miradores de coyuntura, Luque ganaría el Ejecutivo comodorense pero con una fuerte influencia arcionista en el Legislativo como para garantizar que se cumplan ´los acuerdos electorales´. Lo mismo, aunque al revés de lo que deberá sobrellevar el Ejecutivo provincial en la práctica, no en la teoría. Todo este galimatías de dominación casi freudeano que resulta hasta imperceptible para el grueso de la militancia y mucho más para el del electorado, no parece a las claras premeditado por la conducción de un sector que no logra ponerse de acuerdo ni para definirla fecha de elecciones partidarias. Por el contrario evidencia en el fondo la prevalencia de un ´gran arquitecto´ (con escribano incluido) de la matrix política chubutana que tiene clarísimo que cuanto más compartimentadas las voluntades, mejor se garantizarán los resultados de control y más se acotarán los riesgos de desmarque de lo que realmente importa, que son las ganancias. Habrá que ver…