AUTORIDADES DEL PJ NACIONAL MEDIARON EN LA DISPUTA ENTRE PERONISTAS CHUBUTENSES ORTODOXOS Y LOS ´PROSCRIPTOS´. SE DEFINIÓ CONFORMAR EL PARTIDO FRENTE DE TODOS CHUBUT CON APERTURA Y REAFILIACIÓN MASIVA. LA ´LETRA CHICA´ DEL ACUERDO Y LA PUERTA QUE NO LLEGÓ A GIRAR DEL TODO

Compañeros, las canicas

Por Trivia Demir

Al parecer ayer terminó la peregrinación a ´san Gioja´ para tomarse la foto que buscaba legitimar a varios referentes progresistas de Chubut que quiere estar adentro del Frente de Todos pero también adentro del PJ, que aunque parezca extraño, no es lo mismo. Fue cuando pasado el mediodía del jueves, diferentes actores del peronismo chubutense después de días de polémicas y de ir de a grupos a visitar y tratar de convencer de ´su verdad´ al presidente del PJ a nivel nacional, finalmente se reunieron en la sede del Consejo Nacional del Partido Justicialista (PJ) en una mesa donde se sentaron tres y tres de cada posición. Por un lado estuvieron Ricardo Sastre, Gustavo Sastre, Adrián Maderna que fueron candidatos por otra fuerza que no fue el PJ, sino por Chubut al Frente a través del partido ChuSoTo; y Norberto Yauhar, Carlos Linares y Ricardo Mutio que fueron a elecciones por el Frente de Todos en representación del PJ provincial y perdieron. El ´dime y direte´ es que ahora los ganadores con el sello de otro partido quieren volver a caminar por la interna del PJ y hasta aspiran a ir por la conducción, algo que según entiende los ortodoxos, está condenado por haber sido candidatos por otros partidos, y por definición del último congreso partidario provincial, aunque posteriormente la Justicia Federal desacredito la interpretación.
En ese marco, en carácter de ´árbitros´ por la conducción nacional del partido participaron el presidente del PJ nacional, José Luis Gioja; los apoderados Patricia García Blanco y Jorge Landau; y Ginés González García, miembro de la Comisión de Acción Política.
De acuerdo al comunicado oficial que sintetizó gran parte del espíritu del acuerdo, acordaron “una nueva conformación del Frente de Todos de Chubut. En este sentido, y a partir del pedido del Consejo Nacional, decidieron prorrogar las elecciones internas convocadas para elegir autoridades partidarias en la Provincia por 90 días”, y dispusieron “la confección de un nuevo padrón que implicará la reafiliación de todos los compañeros y compañeras chubutenses sin limitaciones (sic)”, indicaron en un comunicado. Además, los dirigentes que componen Chubut al Frente y el PJ, se comprometieron a integrar una lista única partidaria y a unificar todos los bloques de legisladores municipales y provinciales.

Cuidado con la ´letra chica´

Todo esto que se acordó además ser emitido exclusivamente de manera oficial por el partido, inmediatamente culminada la reunión ya tuvo versiones e interpretaciones varias, evidenciando que el ´acuerdo´ tendría ´letra chica´ cuyo develo se producirá luego que transcurra la tregua de por lo menos 90 días que habría ordenado el ´dueño de la pelota´, que a esta altura es Alberto Fernández.
Como todo contrato, que cuanto más ´leonino´ se torna más incumplible y reprochable, el de ayer seguramente trajo algo de paz en las tropas, pero también aceleró preocupaciones veladas en la tinta indeleble que guarda el escueto documento. Un tema que quedó plasmado es que así planteado el comunicado, la mesa nacional no hizo más que parar la bronca que ya había llegado a estrados judiciales, pero de modo alguno resolvió la confrontación. Para los referentes del Justicialismo chubutense habrá que conformar como partido el Frente de Todos en Chubut, que hoy no existe como tal, y en ese marco, se abrirá el llamado para que cada partido con tinte progresista se pueda incorporar, si lo desea, como puede ser el caso de Chubut Somos Todos, del PJ Chubut y otras fuerzas provinciales o vecinales. Pero no plantea nada ´explícito´ sobre el propio sello del PJ Chubut, más que postergar las elecciones internas, como gesto de apertura.
Además el comunicado habla de armar un nuevo padrón con la “reafiliación de todos los compañeros y compañeras sin excepción” pero se entendería que para integrar el Frente de Todos, no para refundar en todo caso el ya histórico PJ Chubut. Sobre todo considerando las limitaciones existentes que marca el reglamento interno sobre tiempos para ser candidatos, y que a la fecha considera necesaria una antigüedad de dos años para ser presidente de un Consejo de Localidad, y de cuatro años para ser consejero provincial. Si la “reafiliación masiva y sin excepción” fuera para el PJ Chubut, no quedarían referentes en condiciones de ser próximas autoridades, no así del Frente de Todos Chubut en su versión fundacional.

Técnicas de supervivencia y algo más

Con esta ´trampita´ los peronistas ortodoxos provincianos que perdieron las últimas elecciones provinciales a manos de un sector que después se alió con sus ´propios´ nacionales, buscarían resistir en un bastión donde no les queda otra que visibilizarse con una purificación extrema, hasta reubicar los aliancistas pero también reciclarse ellos mismos aunque sea en el interior de la máxima estructura. De otro modo quedarían totalmente fuera de juego y hasta del llano. Por eso buscaron poner límite a la escalada victoriosa que representa los mellizos Sastre y Maderna, quienes más allá de Arcioni, pueden pelear a futuro la nueva conducción provincial en 2023. Estos funcionarios ya consagrados tienen además de la fortaleza que da el triunfo en las urnas, el aparato que otorga las gestiones, y cuatro años por delante para delinear su poder. Mientras que los perdedores solo tienen el peso del sello y buscan en él, el paraguas para resguardarse de la ola aliancista que surfeó impecablemente Sergio Massa otorgándole a Chubut al Frente como fuerza exclusivamente provincial, un nuevo capítulo dentro del movimiento nacional del Frente de Todos. De allí que hayan labrado incluso la famosa ´lista negra´ de los 141 ´compañeros´ afiliados y candidatos por otro partidos, a los que intentaron desafiliar y por ende proscribir del PJ Chubut a partir de la voluntad del Congreso.

Los ´proscriptos´ se resisten

Casualmente en esa lista negra, los principales ´proscriptos´ reclaman que fueron principalmente los referentes ganadores electoralmente y con mayor proyección política en Chubut, y que circunstancialmente y por impedimentos de la estructura orgánica debieron apelar a presentarse por otra fuerza, reclamando su histórica pertenencia y afiliación justicialista.
Además, de la reunión de ayer los ´proscritos´ interpretan que el mandato del apoderado del PJ nacional, Jorge Landau fue aceptar el fallo del juez federal Hugo Sastre que dispuso dejar sin efecto la desafiliación partidaria nacional de los 141. Algo que en el comunicado no fue abordado expresamente así.

Puerta chica y fija

Así las cosas, la amplitud del PJ llegó hasta donde llegan las jinetas, a una distancia de hombro a hombro, y de tres referentes por vez. De hecho, uno de los que sintió el rigor de la estructura y el desencuentro con la puerta grande y giratoria, fue el poderoso referente sindical Jorge “Loma” Ávila, que se apersonó con varios de sus asesores (se presume que en representación propia pero también de la mesa de ´paladar negro´ que integra Arcioni), y no le fue permitido participar del mitin. Paradójicamente “Loma” es uno de los casos excepcionales que podría haber forzado una lógica diferente de las autoridades partidarias nacionales y que pensaban esgrimir los ´proscriptos´, ya que Ávila no figuró en las ´lista negra´ aunque es funcionario del gobierno de sello diferente al PJ. Aunque lo que argumentan los ortodoxos provinciales es que pese a eso, no fue candidato por lo cual no está alcanzado por el reglamento y el articulado ´proscriptor´.

Chubut, el botón de muestra

Más allá de lo anecdótico que será el entrevero peronista provincial que no terminan nunca, para decepción de los que creen que estos capítulos tal serie de Netflix, tienen un final; el conflicto tempranero en la provincia deja en evidencia lo que sucederá más tarde que temprano en todo el resto del país con el fenómeno de reubicación de fuerzas que inevitablemente se dará en el ´Justicialismo´ nacional.
La escritora María Sáenz Quesada afirma en su libro “El fin de la Argentina liberal. El surgimiento del peronismo” que después del triunfo del Frente de Todos, las preguntas por el resultado de las recientes elecciones y la diversidad al interior de la coalición ganadora se vuelven inevitables, como tantas otras veces que alcanzó el poder. Para la autora hay un peronismo tradicional, que sería el expresado por la mayoría de los gobernadores, y hay un peronismo que se siente representativo de una revolución. Sólo que «Antes había un líder carismático. Ahora el problema es que hay varios líderes o lideresas», dice, al referirse a Alberto Fernández, a Cristina Kirchner, «al poder del 52% de Kicilloff», y a los gobernadores.
La autora presagia, merced a la experiencia de desencuentros de la propia Cristina con el peronismo, y ante la fina ´unidad´ que se dio para alcanzar este triunfo electoral, que además y raídamente una vez alcanzado el poder, “habrá una interna, que esperemos sea pacífica y evolucione de la mejor manera posible, que tendrá que ver también con el hecho de que Fernández tenga al principio algún éxito económico, o si se desmorona la economía”. Reflexiona además que “el peronismo es esencialmente distributivo, de ahí que se lo asimile con todos los populismos. Pero ahora hay poco para distribuir, así que lo que viene es una gran incógnita», afirma. Datos y detalles a seguir de cerca. Habrá que ver…

Fuentes: NA, PJ N, LN, propias

ÚLTIMAS NOTICIAS