En las instalaciones del Centro de Veteranos de Malvinas de Puerto Madryn, Yamila Bustamante, María Belén Oliva, Bárbara Montesino y Néstor Huircapán, todos ellos hijos de veteranos de Malvinas, pronunciaron un emotivo discurso tras conmemorarse el Día de la Soberanía Nacional, el pasado 20 de noviembre, en el que recordaron no sólo la epopeya de los soldados argentinos en las Islas Malvinas, sino que también se posicionaron críticamente respecto de los tratados actuales que consideraron “entreguistas”.
El primero en hablar fue el veterano Guillermo Huircapán, quien expresó que el miércoles fue “un día muy especial para toda la sociedad argentina, pero especialmente para aquellos que hemos tenido una relación directa con el conflicto bélico de Malvinas” y remarcó que “si bien se conmemora la batalla de la Vuelta de Obligado, la última lucha directa por nuestra soberanía en Malvinas fue la de 1982, que hoy todavía tiene consecuencias, no solamente para Argentina sino para toda América Latina”.
Por ello, reconoció, “es un día crítico para nosotros, no de conmemoración sino de reclamo y de reivindicación de nuestros derechos soberanos en Malvinas”.
Acto seguido, la “Generación Hijos” de los veteranos leyeron un comunicado; “ellos están tomando la posta, ya que por una cuestión generacional tenemos que ir dejando nuestro legado a quienes nos suceden, que son nuestros hijos y nietos”, sostuvo Huircapán.

La “tercera invasión inglesa”

El documento fue leído por su hijo, Néstor, quien precisó que “si bien el 20 de noviembre se conmemora el Día de la Soberanía Nacional, rememorando la batalla de la Vuelta de Obligado en 1845, ya en 1820 flameó por primera vez nuestra insignia patria en las Islas Malvinas, representando al Gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata, afirmando así nuestros derechos por ese archipiélago heredado al habernos independizado de España”.
No obstante, recalcó que “en enero de 1833 se consumó lo que llamamos la ‘tercera invasión inglesa’ sobre las islas, desalojando por la fuerza a los compatriotas que allí estaban y al gobernador argentino; desde entonces, nuestro país ha realizado importantes reclamos ante los organismos internacionales, lográndose en 1965 la superlativa Resolución 2.065, constituyendo un triunfo diplomático que derivó el argumento británico del Principio de Autodeterminación de los pueblos, debiendo discutir la soberanía entre el Reino Unido de Gran Bretaña y la Argentina”.

Contra el pacto Foradori-Duncan

Sin embargo, recordó Huircapán, “Inglaterra nunca cumplió dicha Resolución, negándose a negociar soberanía, quedando en nuestras islas como uno de los últimos enclaves colonialistas en el Atlántico Sur”, agregando que “en 1982, sin entrar en el análisis de la decisión de la dictadura de aquél entonces, soldados argentinos defendieron a sangre y fuego ese territorio, demostrando valor, entrega, coraje; y centenares no volvieron, quedando en vigilia en el Cementerio de Darwin y en el frío Mar del Sur, dejando una herida en nuestra sociedad que aún perdura y que lo hará por siempre”.
Estos hechos contemporáneos, advirtió, “no han concientizado a muchos de nuestros gobernadores, que han llevado a cabo acuerdo que sólo benefician al invasor, como el Tratado de Madrid y el último acuerdo entreguista, realizado por el actual Gobierno Nacional: el pacto ‘Foradori-Duncan’, sobre petróleo, pesca y comunicación, que parece haber seguido lo dicho por el presidente Macri, cuando expresó que ‘nunca entendí los temas de soberanía, las Islas Malvinas serían un fuerte déficit nacional para Argentina’”.

Violación a la soberanía

Por último, Yamila Bustamante citó una conocida frase del ex presidente Arturo Illia: “No le tengo miedo a los de afuera que nos quieren comprar, sino a los de afuera que nos quieren vender”.
Asimismo, agregó que “hoy vemos que se consuma una nueva violación a nuestra soberanía, con el viaje aéreo de Brasil, pasando por Córdoba hasta Malvinas, avalado por un gobierno cipayo que sólo busca ser funcional a los poderosos del mundo” y concluyó que “este Centro de Veteranos de Guerra y Generación Hijos repudian estos acuerdos que resultan ignominiosos para el pueblo argentino y la memoria de todos aquellos que han ofrendado sus vidas en defensa de la Patria, reclamando a la administración entrante a nivel nacional una política exterior en un todo de acuerdo con nuestra primera disposición transitoria de nuestra Constitución Nacional”.