LOS INGRESOS DE CHUBUT POR REGALÍAS SON CLAVE PARA SALIR DEL ATOLLADERO, SIN EMBARGO SOLO EN 2019 SE PERDIERON 12 MILLONES DE DÓLARES POR RETENCIONES NACIONALES. LA GRAN PULSEADA CON NACIÓN Y LAS CUENTAS CLARAS QUE NO SE DEBEN PERDER DE VISTA. LA TIBIA PERFOMANCE DE YPF Y LA NECESIDAD DE REACTIVAR LA PRODUCCIÓN DE LA EMPRESA DE BANDERA EN LAS DEMÁS PROVINCIAS MÁS ALLA DE NEUQUÉN

A no descuidar lo importante

Por Trivia Demir

Las primeras corridas económicas del año evidentemente requieren pragmatismo para resolver lo urgente, pero sobre todo capacidad para no desatender lo importante. Y en eso se asentaría la cuidadosa pero firme negociación que deberá llevar adelante Chubut si sus representantes no se dejan condicionar por las urgencias, haciendo los ´deberes´ que pide Nación respecto a los achiques presupuestarios pero también sosteniendo los reclamos más allá que se haya desistido de la vía judicial. De otro modo será muy difícil, por no decir imposible, levantar cabeza financiera.
Uno de los interrogantes que siempre saltan al ruedo cuando la crisis agobia es si “¿Puede el petróleo salvar a la economía de Chubut?”, una pregunta que fue título de nota del columnista comodorense Raúl Figueroa en el mes de Julio pasado, cuando el horizonte era tan negro como el de ahora.
Para intentar respuestas a esta incógnita hay que evaluar números pero sobre todo ponerle ficha a la conducción política para que no pierda de vista los reclamos soberanos provinciales en una de esas mesas chicas donde se reparten privilegios. La información dura indica al día de hoy que Nación podría recaudar este año alrededor de 100 millones de dólares por el crudo que se produce en Chubut. Una provincia que sigue yendo de rodillas hasta Buenos Aires a pedir adelantos, cuando en realidad viene perdiendo ingresos por el menor precio al que se liquidan las regalías. Esto es un dato estadístico que seguramente Guzmán deberá agendar: en 2019 las regalías de Chubut tuvieron una merma importante en relación a 2018, en un territorio endeudado que debe cumplir obligaciones de vencimientos y sobre todo con sus empleados.
Los dato oficiales del INDEC reflejan que en todo 2018, Chubut exportó petróleo por 1.200 millones de dólares, mientras que en 2019 se mantuvo la cifra. Partiendo de los 1.200 millones de dólares y aplicando una retención que comenzó en el 10% pero bajó al 6,7% por efecto de la devaluación de agosto, los cálculos dan cuenta que Nación recaudó alrededor de 100 millones de dólares a lo largo del año. Ese monto no es totalmente asimilable a las pérdidas de regalías que tuvo Chubut, sino que esa merma de ingresos provinciales se calcula sobre una parte de lo que recaudó Nación, que en definitiva se quedó con un porcentaje del precio de venta. Como ese precio de venta es el que se considera para calcular las regalías, los técnicos del sector redondean el cálculo en un 12% de lo que se quedó Nación. En este caso, siguiendo con el ejemplo, la provincia habría dejado de percibir unos 12 millones de dólares. Si consideramos que en enero debe pagar de vencimientos de deuda unos 17 millones de dólares, el número de lo que perdió la provincia productora cobra un sentido dramático.

Producción amesetada

Pese a todo y en cuestión productiva, el balance del año petrolero para Chubut fue en la práctica, positivo si se compara la producción en relación al 2018, que a su vez había marcado un crecimiento respecto de 2017, cuando se tocó el nivel más bajo de producción en más de 10 años. Sin embargo, los datos finales en el año 2019, según las proyecciones realizadas en ámbitos técnicos de la provincia, dieron cuenta de una marcada caída en el mes de noviembre, con un saldo final de tenue alza. De hecho, en noviembre pasado, la merma de producción se ubicó en más de 6.000 barriles por día, en relación a igual mes del año anterior.
También el arrastre negativo se verificó en la producción de gas, que a diferencia del petróleo ya venía en baja en esta provincia. Las proyecciones 2019 arrojaron un saldo negativo de casi un 4% en relación al año anterior.
Todo ese freno a la curva ascendente afirman que se produjo por el impacto del decreto 566, que motivó una menor de actividad (con alrededor de 10 equipos en stand by, según había indicado el líder petrolero Jorge Avila) mientras se esperaba que finalizara el alcance de esa medida y se visualizaran las primeras decisiones del nuevo gobierno nacional.
O sea que entre la tibia producción y la pérdida de ingresos por regalías, además de pensar en nuevos proyectos productivos, Chubut debería afinar su seguimiento sectorial y endurecer sus reclamos.

YPF, una materia pendiente

En la misma línea, Federico Bernal, director de OETEC detalla sobre la perfomance de la empresa de bandera y confirma la baja producción en Chubut, junto a otras provincias. En una nota de opinión titulada “YPF: muy bien las pelotas… ahora a sacar del ostracismo a las provincias productoras”, explica el estancamiento de la empresa que no favorece particularmente a los territorios que poseen el recurso. Dice Bernal “Para que se verifique un cambio positivo en la conducción de la empresa respecto de la nefasta herencia macrista, deberá hacerse mucho. Celebramos la sustitución de pelotas importadas por locales para la campaña ´Llega el verano, llega la pelota de YPF´. Ahora bien, para que efectivamente se verifique un cambio positivo en la conducción de la empresa respecto de la nefasta herencia macrista, deberá hacerse muchísimo más. (…) No puede haber ni habrá una recuperación plena de la energética de bandera sin la profundización de su protagonismo en Vaca Muerta, por un lado, y la recuperación de las inversiones en las cuencas más allá de la Neuquina y en las provincias productoras (con eje en avanzada exploratoria), por el otro. Ojalá estos anuncios no tarden en caer, porque la situación es terminal, no ya para las PyMEs de pelotas de futbol, sino para las provincias productoras de hidrocarburos (exceptuando Neuquén)”.

Datos duros

La producción de crudo de la estatal (incluyendo todas sus subsidiarias), creció 2,7% en 2018, recuperándose del desplome de 2017 (-5,1%). Y respecto de 2015, el año pasado terminó 1,4% por debajo. En el acumulado a noviembre de 2019, la producción aumentó 2,3%, registrando una leve desaceleración sobre el 2,7% del año pasado. En relación a 2015, se ubicó un magro 1% arriba.
En el acumulado a noviembre de 2019, la producción aumentó solamente en la Cuenca Neuquina (ver tabla). Comparando con 2015, la única cuenca que creció es esta última, registrándose drásticos retrocesos en las restantes, destacándose lo ocurrido con la Cuenca del Golfo San Jorge. En este caso, el desplome es del 15%, con una producción reducida en 137.065 m3 (862.137 barriles menos)”.
También la caída se registró en la producción de gas de la estatal (incluyendo todas sus subsidiarias), cayó 3,9% en 2018, y en el acumulado a noviembre de 2019, la producción registró un desplome histórico del 9,1%. Tan grave es la magnitud de la caída que YPF produjo en los once meses del último año de gestión macrista menos gas que en 2015, mismo período. (…)”

Conclusión clara

Así las cosas, en materia petrolera, “YPF S.A. exhibió al 30 de noviembre de 2019 un pésimo comportamiento en todas las cuencas más allá de la Neuquina y en todas las provincias con excepción de Neuquén. Las fuertes caídas en Santa Cruz y Mendoza (segunda y tercera provincia petrolera para la estatal) son alarmantes y deberán ser urgentemente revertidas.
En cuanto al gas, YPF reveló, también al 30 de noviembre de 2019, un penoso comportamiento en todas las provincias y en todas las cuencas (excepción de la Cuyana que, como dijimos, carece de toda importancia). La drástica caída en Neuquén se deriva de la decisión de la administración Macri, que ha priorizado el mega yacimiento Fortín de Piedra (Vaca Muerta) de Tecpetrol en el abastecimiento interno. En el resto de las provincias, la igualmente drástica caída obedece a la gestión neoliberal de Miguel Gutiérrez, presidente de YPF durante el mandato Cambiemos, que sin decirlo declaró inviables a todas las jurisdicciones productoras más allá de Vaca Muerta.
Transcurridos cuatro años de mandato neoliberal, YPF S.A. se despide produciendo menos gas que en 2015 y un 1% más de crudo, pero gracias a los proyectos heredados de la renacionalización. Su retroceso por cuenca y provincia es casi generalizado, así como de pavorosas dimensiones. Sin un desarrollo equitativo y federal, que recupere las inversiones en las cuencas más allá de la Neuquina y en las provincias productoras con eje en avanzada exploratoria, volviéndose a aquellos plays -sobre todo los convencionales maduros- que no solo aporten volumen sino también reposición de reservas, YPF seguirá su lento y penoso divorcio de las necesidades de una Argentina socialmente inclusiva y económicamente autosuficiente. Y no le quedará centavo con el que salvar una sola pelota argentina”. Habrá que ver…

Fuentes: NA, OTEC, ADN, Ámbito Financiero, propias

ÚLTIMAS NOTICIAS