Luego de varios días de suspensión de sus operaciones en todo el país, la empresa Andes Líneas Aéreas retomaría el itinerario de vuelos este día sábado. El conflicto tuvo lugar tras una medida de fuerza llevada a cabo por un sector de los empleados de la firma en Buenos Aires, y afectó la totalidad de los vuelos que la aerolínea opera en Argentina; en este caso, hubo sendas manifestaciones de pasajeros que se acercaron a las oficinas comerciales de la empresa para reclamar por pasajes que habían adquirido, en su mayoría para viajar a Buenos Aires, sin haber obtenido una respuesta por efecto de la protesta de empleados, que reclamaban alrededor de dos meses y medio de salarios atrasados.
Ahora, la empresa volvería a retomar sus vuelos, en el marco de una situación compleja que parecería estar lejos de resolverse; sumado a ello, recientemente desde la firma reconocieron con los bonos TICADEP con los que el Gobierno Provincial saldó parte de la deuda que mantenía desde hacía tiempo, son “de difícil cobrabilidad” en el mercado.

Sin rescate

Asimismo, días atrás había trascendido la intención de que tanto Andes como Aerolíneas Argentinas reflotaran un acuerdo de “reciprocidad”, a partir del cual ambas firmas podrían asistir a pasajeros varados, pero de acuerdo a lo indicado, finalmente dichas gestiones no prosperaron.
El acuerdo había sido utilizado por ambas partes en 2010 y 2016, y las habilitaba a “rescatar” mutuamente a sus pasajeros en caso de que hubiera una alteración de su itinerario por sobreventa de pasajes, problemas operativos o complicaciones meteorológicas, habilitando la disponibilidad de plazas y que luego, la aerolínea asistida, saldara el costo en una cuenta corriente.

Apoyo nacional

Días atrás, el ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, había adelantado que buscarían asistir a la aerolínea, pero “no subsidiarla”, y anticipó que la intención inicial era “direccionar los pasajeros de Andes a Aerolíneas Argentinas”, en el marco de dicho acuerdo de reciprocidad que, finalmente, no pudo ponerse en práctica.
El atraso en el pago de los sueldos fue, en esta ocasión, el motivo que obligó a la empresa a suspender sus vuelos entre el 6 y el 14 de febrero inclusive, retomando las operaciones este sábado.
Asimismo, en noviembre del año pasado, la aerolínea había suspendido temporalmente sus vuelos en Chubut, que implicaban la conectividad de destinos como Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia con Buenos Aires, a raíz de la falta de pago de una deuda de aproximadamente 200 millones de pesos derivados de un acuerdo de canje de pasajes por combustible para la flota de la empresa.

Política aerocomercial

Por otra parte, la firma con 14 años de presencia en el mercado aéreo comercial de Argentina y de capitales netamente nacionales, había dejado de volar a Tucumán, Mendoza y Córdoba, y ahora evalúa si continuará la conectividad con Bariloche.
Operando en frecuencias a Madryn, Comodoro, Salta, Iguazú y Jujuy, la aerolínea contaba, hasta 2018, con un total de 9 aviones y 500 empleados, pero en agosto de ese año debió cancelar varias operaciones y devolver cuatro naves con las que contaba en calidad de “leasing”, disponiendo actualmente de cinco, de las cuales vuelan tres.
El gerente general de Andes, Horacio Preneste, recientemente en diálogo con la prensa vinculó la situación de la firma con la política aerocomercial del último gobierno: “En la gestión anterior se facilitó el ingreso de varias compañías, se sobreofertó el mercado, todos los precios fueron a la baja, se sacó la tarifa mínima, pero no hay mecanismos para controlar el dumping y a nosotros el salto del dólar nos causó un daño tremendo. Hace más de 14 años que estamos en el mercado, somos capitales netamente argentinos y no ha habido ninguna consideración para con todo el esfuerzo realizado. En otros países, antes de hacer una apertura semejante, se procura consolidar a las empresas que están funcionando; aquí se generó un campo de batalla en la que todos se matan”, señaló.