El escandaloso hecho ocurrió sobre la madrugada del sábado pasado en Trelew, alrededor de las 2:20 horas, en la intersección de Belgrano y Gales. Allí, un empleado policial que se retiraba de un servicio adicional observó a un hombre orinando en la vía pública, lo que de inmediato le llamó la atención. Cuando se acercó al sujeto en cuestión, este le propinó varios golpes de puño en el rostro, uno de los cuales le causó un corte en el labio inferior.
El oficial, que ya se encontraba de franco, solicitó apoyo de sus compañeros de guardia, a la llegada de un patrullero, se procedió a identificar al agresor, “L.L.B.”, quien para sorpresa de los agentes es defensor público de la ciudad del Valle.

Imputado por desorden

Al momento de informar el hecho ante la Fiscalía, se notificó que el funcionario no podía ser detenido porque contaba con fueros que lo impiden, una decisión acaso inaudita teniendo en cuenta que ningún defensor público cuenta con fueros que le impidan ser detenido, incluso en el caso de ser hallado cometiendo un delito penal en flagrancia.
Sin embargo, a “L.L.B.” se lo imputó por el desorden causado y la agresión al policía, al que le partió el labio de un puñetazo.
El ataque tuvo lugar a dos cuadras de la Comisaría Segunda; ahora, a pesar de no haber quedado detenido por la insólita decisión de la Justicia, al funcionario podrían sumariarlo.