Este miércoles, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se dirigió al país con un barbijo y rodeado de seis funcionarios protegidos de la misma manera para anunciar que dos de sus ministros que fueron parte de la comitiva a Estados Unidos tienen coronavirus Covid19: el jefe del Gabinete de Seguridad Institucional, general retirado Augusto Heleno, y el titular de Minas y Energía, almirante Bento Albuquerque.
Ambos ministros formaron parte de la comitiva que viajó entre el 7 y el 10 de marzo a Florida, Estados Unidos, donde el mandatario brasileño se reunió con su homólogo estadounidense, Donald Trump.
Pero a la vuelta, Bolsonaro y sus ministros se sometieron a dos análisis para identificar si fueron contagiados. El presidente dio negativo en dos ocasiones. El secretario de Comunicación, Fabio Wajngarten, fue uno de los primeros casos positivos tras el viaje oficial a Estados Unidos y luego se confirmó el caso del jefe de Seguridad. Heleno indicó que no tiene fiebre «ni ninguno de los síntomas relacionados con la enfermedad Covid-19”. «Estoy aislado, en casa y no contestaré llamadas», expresó.
Como se había conocido este martes, el gobierno solicitó al poder legislativo la aprobación del estado de calamidad. La medida servirá para disponer de fondos para combatir la pandemia. «En vista del monitoreo permanente de la pandemia de Covid-19, la necesidad de aumentar el gasto público para proteger la salud y el empleo de los brasileños y la posibilidad de una caída de los ingresos, el gobierno federal solicitará al Congreso que reconozca el estado de calamidad pública. La medida entrará en vigencia hasta el 31 de diciembre de 2020», informó ayer la Presidencia en un comunicado.
«Las medidas necesarias para proteger a la población del virus que ralentizan la tasa de contaminación y evitan el colapso del sistema de salud también implican inevitablemente una fuerte desaceleración en las actividades económicas «, dijo Bolsonaro, según el diario Folha de São Paulo. Y agregó: «Es innegable que, en Brasil, las medidas para hacer frente a los efectos de la enfermedad generarán un aumento natural en el gasto público, que antes no era previsible en la realidad nacional».
Brasil, con más de 200 millones de habitantes, tiene hasta el momento 291 casos confirmados del nuevo coronavirus, y tres fallecidos. Los expertos estiman que la pandemia debe alcanzar su auge en el país sudamericano dentro de unas semanas.